Veintitrés años cumple ya la Galería Max Estrella en Madrid, en la calle Santo Tomé: abrió sus puertas en 1994 con el objetivo de promocionar tanto a artistas emergentes como a creadores consolidados que tuvieran en común su lenguaje innovador.
El escenario donde la sala ha decidido celebrar este cumpleaños será San Lorenzo de El Escorial: en colaboración con el Ayuntamiento de esta localidad madrileña, la Galería presentará intervenciones específicas de algunos de los autores a los que representa en plazas, jardines y patios durante el primer fin de semana de este mes de julio (los días 1 y 2).
Max Estrella ya ha adelantado en qué consistirán algunas de estas piezas: Marlon de Azambuja presentará su trabajo en las farolas de la Plaza de la Constitución; Jorge Perianes y Bernardí Roig presentarán, respectivamente, piedra y figura inquietante pendida de un árbol en los patios de la Casa de Cultura; Luis Úrculo hará desaparecer la estatua de Crispín durante unos días y Almudena Lobera transportará a los vecinos y visitantes de San Lorenzo de El Escorial a una bien repleta playa del Mediterráneo. Estas son algunas de las instalaciones que nos descubrirán el pueblo bajo la mirada de los artistas seleccionados.
Pero no solo en intervenciones callejeras consiste esta propuesta, titulada “El Escorial para los artistas”: en las Salas de Cultura podrá contemplarse la obra del fotógrafo bilbaíno Aitor Ortiz y pinturas de Nico Munuera como anticipo a su próxima exposición individual en el IVAM de Valencia, que tendrá lugar este otoño.
Buena parte de los artistas representados por Max Estrella ya se han manejado en las lides de la intervención urbana tras ser invitados a mostrar su visión de reconocidas plazas y espacios públicos de ciudades de todo el mundo.
Pensando en ejemplos recientes, Eugenio Ampudia contó con la participación ciudadana para Evacuad Madrid, una obra que se llevó a cabo durante una noche en la Puerta de Alcalá de Madrid. La obra de Almudena Lobera Un espectáculo para la vista se presentó en la playa de Benicassim, formando parte del festival de música de esa localidad castellonense, y posteriormente en la playa de Miami Beach, y Marlon de Azambuja, por su parte, ha destacado el potencial escultórico del mobiliario urbano en proyectos en muchas ciudades del mundo. Bernardí Roig también iluminó recientemente la Sala Capitular de la Catedral de Canterbury.
Todos nos invitan a estrenar julio en San Lorenzo de El Escorial con propuestas que nos sorprenderán a pie de calle.
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