Artifacts. Fascinating Facts about Art, Artists, and the Art World

Artifacts. Publicado por PhaidonPhaidon presenta Artifacts, un pequeño volumen, reducido en tamaño pero vasto en contenido, repleto de datos, cifras y curiosidades normalmente omitidas en las biografías o entrevistas a artistas. Son en su mayoría anécdotas que han llamado la atención de estudiosos de la historia del arte y que ahora se comparten recogidas de manera conjunta. Sin ser datos de excepcional importancia, ayudan a ampliar, de una manera muy entretenida, nuestra visión o conocimiento del mundo creativo.

Su cubierta en cuero sintético de color naranja vivo, con las esquinas redondeadas,  a modo de pequeño diario privado, refleja que no solo son importantes los datos sino también la manera de compilarlos y mostrarlos. Artifacts se divide en 5 capítulos: “Artistas”, “Escuela de Arte”, “Estudio de Arte”, “Museo de Arte” y “Mundo del Arte”. A su vez, cada uno de ellos presenta una selección cuidadosamente comisionada de una gran variedad de hechos, algunos de ellos verdaderamente atractivos, que se acompañan de citas, listas, diagramas e ilustraciones originales.

“Artistas” comienza por lo más básico a la hora de conocerlos: saber su nombre. A lo largo de la historia encontramos creadores que han empleado su nombre y su apellido, solo uno de ellos, nombres “artísticos” inventados (muchas veces viéndose obligados a cambiar los originales para evitar algún tipo de discriminación), e incluso sobrenombres o apodos que se les otorgaban atendiendo a sus lugares de procedencia, habilidades o defectos. Es ampliamente sabido, por ejemplo, que Jacopo Robusti era conocido como Tintoretto porque el oficio de su padre era el de tintorero; pero quizás no tanta gente sepa que algunos apodaron a Paul Klee como el Buda de la Bauhaus, por su carácter calmado y reflexivo.

Conocemos a famosas parejas de hermanos artistas, como los Van Eyck, los Bellini o  los Chapman, pero en las páginas de Artifacts podemos descubrir muchas otras, en las que no siempre las dos partes han gozado del mismo éxito. Lo mismo sucede con parejas fuera del estudio, unidas por algo más que la creatividad: Gerda Taro y Robert Capa, Jeanne-Claude y Christo, Anni y Josef Albers, Coosje van Bruggen y Claes Oldenburg, Jasper Johns y Robert Rauschenberg, Georgia O’Keeffe y Alfred Stieglitz, Lee Miller y Man Ray, y un largo etcétera.

Los nombres en Artifacts no solo se refieren a los artistas, también hay quien ha dedicado tiempo a elaborar una lista de los nombres de sus mascotas, fieles compañeras en las largas sesiones en trabajo. La gata Marisol de Frank Stella; Giotto y Goya, los perros de John Baldessari; o Gertrudis Caca Blanca, el águila de Frida Kahlo, por citaros algunos…

“No puedo imaginar mi vida sin mi gato. Es como si pensara que no tiene sentido. Si alguien me pidiera que me describiera realmente en un marco abstracto, junto a mí habría una pequeña marca, como una mancha, y esa pequeña marca sería mi gato”. Tracey Emin

Otras parejas, desde diferentes puntos de vista, las constituyen los creadores y sus musas y modelos, que no podían faltar en este repaso. También otro tipo de colaboraciones como aquellas entre músicos y artistas, a los que encargaron las portadas de sus discos: una “perfecta armonía” de la que saldrían auténticas joyas para el disfrute de todos.

Algunos también disfrutaréis mucho conociendo los intereses de los artistas cuando se animaban a armar sus propias colecciones, entre las que hay verdaderas curiosidades —como la de palillos de dientes de Edmund de Waal…—; o las reflexiones que algunos nos han dejado acerca de las influencias en su trabajo:

“La experiencia más importante fue ver la obra de El Greco en vivo. Tenía dieciséis o diecisiete años, y por primera vez me di cuenta de lo que realmente significaba pintar”. Luc Tuymans

No hace falta decir que la vida del artista no es siempre un camino de rosas. Algunos de los más famosos también llevaron a cabo otros trabajos antes de hacerse un nombre en la historia del arte. Más allá de las socorridas salidas como profesores y camareros, ejercidas por muchos, John Currin trabajó como constructor, de Kooning como carpintero y Maurizio Cattelan ha sido, además de artista, conserje, cartero y asistente en una morgue. Es curiosa, en este sentido, la lista que Agnes Martin envió en 1980 a Arnold Glimcher, fundador de Pace Gallery, en la que cuenta hasta 35 trabajos que realizó antes de convertirse en artista a la edad de 30 años.

El siguiente capítulo, “Escuela de Arte”, refleja como muchos de los grandes nombres que hoy reconocemos en museos de todo el mundo no llegaron a terminar sus estudios reglados o directamente nunca fueron admitidos en las escuelas de arte. Nos ofrece también algunas reflexiones de artistas sobre su etapa de formación y otras de los que luego pasaron por las aulas como maestros.

Se señala asimismo la importancia de los talleres, del papel del maestro y su relación con los discípulos, así como las influencias entre los círculos de artistas, mostrando unas interesantes constelaciones que parten de un referente central.

En un capítulo dedicado a la escuela no podía faltar la alusión a la más famosa de todos los tiempos: la Bauhaus, repasando sus  profesores y alumnos más ilustres.

También hay páginas dedicadas a los materiales, en las que se enseña desde la anatomía de un pincel a sus distintas tipologías y utilidades; un pequeño glosario de términos artísticos y unas breves reflexiones que nos han dejado algunos artistas sobre el momento de poner título a sus pinturas.

“Jackson solía dar a sus imágenes títulos convencionales —Ojos en el calor o El azul inconsciente, etc.— pero ahora simplemente los numera. Los números son neutrales. Hacen que la gente mire una imagen por lo que es: pintura pura”. Lee Krasner

Entramos en el capítulo “Museos de Arte” reconociendo la silueta de algunos de los más emblemáticos, que son equiparados a bellas esculturas diseñadas por grandes figuras desde Lloyd Wright a “starchitects” como Frank Gehry, Zaha Hadid o David Chipperfield. Os dejamos esta imagen para poner a prueba vuestro conocimiento en la materia.

Artifacts. Publicado por Phaidon

Además de un estudio estadístico sobre la diversidad (procedencia y porcentaje de hombres y mujeres) de los artistas que se exponen en las colecciones permanentes de una selección de 18 museos de arte norteamericanos, en este apartado se explica la simbología de numerosos elementos que frecuentemente podemos encontrar en cuadros: frutos como la manzana, la nuez o la granada; animales como el caballo, el mono o el buho; flores como la violeta, el lirio o el narciso… Pero también la simbología de la posición de las manos o determinados gestos que desde la antigua Grecia han intrigado a los estudiosos.

Finalmente, el capítulo “Mundo del Arte” nos lleva hasta dos de las ciudades que tradicionalmente, desde el siglo XVII hasta los primeros años del siglo XX, dominaron los circuitos artísticos, tanto en cuanto a formación como a exhibición y a mercado del arte: Londres y París.

Y en ellas, a su vez, la publicación nos situa en dos lugares muy concretos. El primero es el 13 Tite Street, en el londinense barrio de Chelsea, donde vivieron sucesivamente James Abbott McNeill Whistler, John Singer Sargent y Augustus John. En esa misma calle, pero en el nº44, se instalaría también Oscar Wilde.

El segundo, la Rue Campagne-Première, de París, en la que residirían figuras como Arthur Rimbaud, Rainer Maria Rilke o Giorgio de Chirico, entre otros artistas. Allí también se encontraba el café Chez Rosalie, del que era habitual Amedeo Modigliani. La famosa calle quedaría  para siempre inmortalizada por Jean-Luc Godard en la escena final de su À bout de soufflé (Al final de la escapada), posiblemente en un guiño al que era uno de sus pintores favoritos, Nicolas de Staël, que, curiosamente, había vivido también allí.

Las últimas páginas del libro las ocupa un repaso a los principales “manifestos” de la historia del arte del siglo XX; también a los críticos que acuñaron importantes términos, estilos y movimientos de los que hoy todos hablamos; a los artistas más cotizados de la última década; un recuerdo al pionero Leo Castelli; una mención a la irrupción de los NFTs; y diez tipologías de coleccionistas actuales.

Artifacts proporciona de forma amena una buena dosis de píldoras sobre el mundo del arte y muchos de sus protagonistas, que encienden la chispa de la curiosidad.

 

TÍTULO: Artifacts: Fascinating Facts about Art, Artists, and the Art World

AUTOR: Editores de Phaidon

EDITORIAL: PHAIDON

EDICIÓN: 2022

PRECIO: 19,95 euros

PÁGINAS: 176 pp.

 

 

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