El Escorial se suma al quinto centenario de El Bosco

En el Real Monasterio se muestran sus obras pertenecientes a las colecciones reales

San Lorenzo de El Escorial,

Ya os hemos hablado más de una vez de las exposiciones que conmemorarán, en España y en Holanda, el quinto centenario de la muerte de El Bosco y de las recientes controversias surgidas en torno a la atribución de algunas de sus pinturas, la mayoría de ellas ni firmadas ni fechadas.

A la gran retrospectiva que a partir del 31 de mayo podrá verse en el Museo del Prado, y que el pasado febrero abrió sus puertas en el Noordbrabants Museum, hay que sumar la exhibición de las piezas del artista y de su taller que forman parte de las colecciones reales españolas en el Monasterio de San Lorenzo El Escorial.

Esta muestra puede contemplarse hasta el 1 de noviembre y nos recuerda que, aunque la personalidad del monarca y la audaz pintura de El Bosco parezcan contrapuestas, Felipe II fue uno de sus coleccionistas más entusiastas, y precisamente el trasfondo religioso y satírico de su obra fue determinante para que una gran mayoría de las piezas que atesoró acabara destinándose durante su reinado al Monasterio de El Escorial.

En 1574 llegaron allí algunos de sus trabajos más importantes, como una versión del Carro de Heno, La Mesa de los Pecados Capitales, La Adoración de los Magos, Cristo con la cruz a cuestas y varias Tentaciones de San Antonio. Además, en 1593 llegaron otros cuadros procedentes de la almoneda de Fernando de Toledo, hijo natural del gran duque de Alba y Gran Prior de la Orden de San Juan, como El Jardín de las Delicias o La Coronación de espinas.

Fray José de Sigüenza definió su obra como una sátira pintada de los pecados y desvaríos de los hombres

Ambrosio de Morales y Felipe de Guevara revelaron aspectos interesantes para la interpretación moralizadora de estas pinturas, pero fue sobre todo el jerónimo Fray José de Sigüenza quien se refirió de forma más amplia, en su texto Fundación del Monasterio de El Escorial (1602), al arte del flamenco, subrayando que su obra no era herética, sino una “sátira pintada de los pecados y desvaríos de los hombres”, poniendo de manifiesto la crítica a los vicios y costumbres de la sociedad del momento, tan acorde al sentir del rey.

El Bosco. Cristo con la cruz a cuestas, 1505-1507
El Bosco. Cristo con la cruz a cuestas, 1505-1507

Junto a un precioso original del Cristo con la cruz a cuestas y una versión del taller del pintor de La coronación de espinas, se exhibe en El Escorial por primera vez el ejemplar escurialense del Tríptico del Carro de heno, que ha sido restaurado recientemente. Los resultados han permitido reubicar esta obra dentro del género de composiciones alegóricas y satíricas que El Bosco llevó a cabo en estrecha colaboración con su taller familiar.

Además de las tablas, se exhibe en el Monasterio la tapicería del pintor, conocida como Disparates de El Bosco o Caprichos de Bruegel, una de las colgaduras más logradas de la colección de Patrimonio Nacional. Se trata de una serie única, por haberse inspirado en la obra de El Bosco según cartones atribuidos a Pieter Bruegel el Viejo.

Los cuatro tapices, titulados El jardín de las delicias, El carro del heno, Las tentaciones de san Antonio y San Martín y los mendigos, fueron tejidos en Bruselas entre 1550 y 1570, con hilos de oro, plata y seda. No sabemos cómo llegaron a la corte madrileña, pero sí que proceden de la colección del cardenal Antoine Perrenot Granvelle.

ORIGINALIDADES

Cristo con la cruz a cuestas, 1505-1507. Presentó El Bosco la escena de forma muy original, como un cortejo procesional compuesto de hombres de apariencia burguesa y en actitudes impasibles, abandonándose el dramatismo habitual del tema. Cristo mira al espectador con cierta mansedumbre y su cuerpo inclinado por la enorme cruz parece sobrellevar con increíble serenidad la experiencia de pisar una tabla con clavos, detalle que aparece en las miniaturas del siglo XV. Al fondo destaca una imaginaria Jerusalén amurallada y dominada por una alta torre que evoca las ciudades medievales de los Países Bajos.

Taller de El Bosco. La Coronación de espinas, posterior a 1516
Taller de El Bosco. La Coronación de espinas, posterior a 1516

La coronación de espinas, posterior a 1516. Es una de las escenas más dramáticas de la Pasión de Cristo adscritas al ámbito de El Bosco (a su taller) y su presentación en un círculo le otorga al tema una dimensión cósmica. Era muy novedoso presentar a Cristo mirando al espectador de forma directa, de manera muy acorde con la “devotio moderna”, así como el que aparezca con un manto blanco y no púrpura, tal como señalan los Evangelios. A su izquierda encontramos un sumo sacerdote judío, portando un cetro ornado con una efigie de Moisés con las tablas de la ley; y detrás otro espectador más, vestido elegantemente, que algunos investigadores consideran que sea un autorretrato de El Bosco. Y a su derecha vemos tres verdugos con fisonomías caricaturescas muy inquietantes, uno de ellos con un broche con el águila bicéfala imperial, como representante del poder civil. En torno al globo terrestre se representa en grisalla parda una lucha caótica entre ángeles y diablos por la salvación del hombre.

Prueban el buen recibimiento de esta composición las distintas versiones casi idénticas existentes.

Tapiz El carro de heno, 1550-1560. La composición de este tapiz, como ya hemos adelantado, se considera una recreación de Pieter Bruegel inspirada en la composición de El Bosco para la tabla central del tríptico El carro del heno. El centro lo ocupa una gran esfera de cristal rematada por la cruz a modo de un globo terráqueo transparente que simboliza el mundo que flota a la deriva —se inclina sobre su eje—, en un mar repleto de peces y animales fantásticos y monstruosos. La sensación de movimiento e inestabilidad de la composición se acentuaba por los brillos de los hilos de plata destellantes en las crestas de las ondas marinas, hoy perdidos en parte por la oxidación de sus láminas. Puede interpretarse esta composición como una alegoría de las atrocidades cometidas por los hombres en su búsqueda sin escrúpulos de la riqueza y los bienes materiales.

El Bosco. Tapiz El carro de heno, hacia  1550-1560
El Bosco. Tapiz El carro de heno, hacia 1550-1560

 

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