Delacroix, el más legítimo de los hijos de Shakespeare
Artista cultivado, Eugène Delacroix fue un espectador teatral atento e interesado por la renovación del panorama escenográfico francés en la primera mitad del s XIX. Fascinado por la representación de Hamlet en el Odeon, pintó en 1825 Hamlet et le spectre de son père y desde 1830 consagró a esa obra de Shakespeare una serie de litografías. Lo mismo haría con el Fausto de Goethe en 1827. Una selección de esas piezas se exhibe en el Musée Eugène-Delacroix hasta el 30 de junio.