12 euros: el Museo Thyssen-Bornemisza establece una tarifa única para visitar su colección y sus exposiciones temporales

El Museo Thyssen-Bornemisza comienza el 2016 con un cambio en sus tarifas de entrada. A partir del próximo 9 de febrero, día en que se abrirá al público la muestra “Realistas de Madrid”, el Museo madrileño implantará una tarifa única de 12 euros con la que los visitantes podrán acceder tanto a las exposiciones temporales como a la colección permanente del centro. De esta forma, por un precio único y menor que una entrada combinada o que la suma de entradas individuales para los fondos y para las muestras, podremos ver más arte por menos dinero.

El precio de 12 euros corresponde a la entrada ordinaria, mientras que la reducida será de 8 euros y la de grupo (a partir de 7 personas) de 10 euros. Pueden beneficiarse del precio de la entrada reducida, como es habitual, los mayores de 65 años, los pensionistas, los estudiantes, los titulares de Carné Joven, los profesores de la Facultad de Bellas Artes, las familias numerosas y los ciudadanos con una discapacidad superior al 33%.

Hay que recordar que el Museo Thyssen cuenta, además, con la posibilidad de contemplar su colección permanente gratuitamente todos los lunes del año de 12:00 a 16:00 horas, con el patrocinio de Mastercard, y que continuarán beneficiándose de la entrada gratuita tanto a la colección como a las exhibiciones temporales, todos los días del año, los niños menores de 12 años acompañados de adultos, los miembros del ICOM y los ciudadanos en situación legal de desempleo.

REALISMO MADRILEÑO, LOS WYETH O CARAVAGGIO, PRÓXIMAS EXPOSICIONES

Obras de Amalia Avia, Francisco López, Julio López, María Moreno, Esperanza Parada, Isabel Quintanilla y el propio Antonio López, figuras esenciales del realismo madrileño, formarán parte desde el 9 de febrero de “Realistas de Madrid”. Podrán verse óleos, esculturas, relieves y dibujos procedentes de las colecciones de los propios artistas, de instituciones internacionales y de colecciones particulares, fundamentalmente españolas y alemanas. La muestra subrayará sus puntos en común.

El 1 de marzo el Thyssen abrirá dos muestras paralelas en torno a la producción de Andrew y Jamie Wyeth, artistas fundamentales también del realismo, en este caso americano. Por un lado, una retrospectiva de ambos organizada en colaboración en el Denver Art Museum, centro donde actualmente se exhibe, y por otro, “The Secret Sits. Wyeth´s Wonderland”, que contará con fotografías de Joséphine Douet, quien ha retratado los lugares y motivos que inspiraron a Wyeth en su ciudad natal en Pensilvania: Chadds Ford.

Ya en junio, desde el día 21, llegará al Thyssen una exposición que analizará la influencia de la obra de Caravaggio en los pintores del norte de Europa. Además de pinturas de todas las etapas de este artista, veremos otras de sus principales seguidores en Holanda, Flandes y Francia, como Dirk van Baburen, Hendrick Ter Brugghen, David de Haen y Gerrit van Honthorst, Nicolas Regnier y Louis Finson o Simon Vouet, Claude Vignon, Nicolas Tournier y Valentin de Boulogne.

El otro protagonista del verano en el Thyssen será el impresionista Caillebotte: la muestra “Caillebotte, pintor y jardinero” repasará la importancia del tema del jardín en sus trabajos y también su relación con Monet. La articularán cuatro secciones dedicadas al París de Haussmann, a sus veranos en Yerres de 1861 a 1879, a sus recorridos por el Sena y sus viajes a Normandía entre 1880 y 1888 y a sus pinturas en Le Petit‐Gennevilliers, realizadas entre 1888 y 1894.

Y la última exposición del Thyssen este año, abierta desde el 18 de octubre, también estará dedicada a un impresionista: será “Renoir y la intimidad”, que subrayará el papel que ocupan las sensaciones táctiles en los lienzos del francés, tanto en escenas de grupo, retratos y desnudos como en naturalezas muertas y paisajes. Esta muestra, compuesta por setenta obras, viajará después (ya en 2017) al Museo de Bellas Artes de Bilbao. Os iremos informando.