El Design Museum londinense hace hasta marzo gala del trabajo de uno de los modistos británicos más reconocidos internacionalmente, Paul Smith, repasando hasta el 9 de marzo de 2014 su trayectoria, sus creaciones, inspiraciones, colaboraciones e influencias a partir de cuarenta piezas de indumentaria con sus característicos colores chillones y estampados, fotografías y documentación tomada de su archivo personal y fechada entre los inicios de Smith en Nottingham hasta su etapa actual, la de mayor proyección internacional.
La exhibición, titulada “Hello, my name is Paul Smith”, analiza las razones del éxito duradero de su firma, el carácter intuitivo de sus diseños, la unión en la figura de Smith de los papeles de diseñador y empresario y la combinación del empleo de técnicas de confección tradicionales con el toque contemporáneo de sus prendas.
En la muestra también se incluye una recreación de su oficina, repleta de los libros, joyas, obras de arte, antigüedadades y objetos personales de los que a menudo toma ideas, y de la primera tienda de Smith en Nottingham, en Byard Lane, un espacio de sólo 3 x 3 metros, así como diversos audiovisuales que nos invitarán a sumergirnos en la mente del diseñador. Además veremos una reproducción del improvisado primer “showroom” que montó en un hotel de París, donde expuso encima de una cama dos camisas, dos jerséis y dos trajes y la proyección de su último desfile, correspondiente a la primavera-verano 2014.
Hello, my name´s Paul Smith
La suya es una historia de trabajo y superación. Nacido en 1946, Paul Smith comenzó a trabajar a los 16 años, sin cualificación alguna, en un almacén de ropa de su ciudad natal y después, a los 17, en la tienda de moda de un amigo, un establecimiento llamado The Birdcage. Sólo dos años después, logró abrir su primera tienda propia también en Notthingam y en 1976 lanzó su primera colección masculina bajo la etiqueta que lleva su nombre.
En 1979 abrió al público su primera tienda londinense, en Covent Garden, y arquitectos, actores y músicos se convirtieron pronto en sus clientes.
El título de la exposición, “Hola, mi nombre es Paul Smith”, tiene su origen en los primeros años de su carrera como diseñador de moda, cuando se presentó en una fábrica para pedir trabajo y pronunció esa frase ante el encargado.
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