Para celebrar el primer aniversario del Garage de Moscú en la que ya es su sede permanente, el artista suizo Urs Fischer ha diseñado específicamente para este espacio el proyecto Small Axe: una serie de instalaciones que, jugando con la escala y la percepción sensorial, nos proponen contemplar tanto el museo como sus alrededores desde perspectivas renovadas de las que no están exentas el humor y la ligereza.
La muestra ocupa la galería central del Garage e incluye una veintena de esculturas de bronce pintadas a mano que han sido producidas especialmente para la ocasión. Ejecutadas a pequeña escala, cada una de ellas captura momentos en transición entre dos fases: un tulipán marchitándose en un florero, un pie en movimiento, una silla a punto de ser levantada…, piezas que contrastan de forma clara con la arquitectura soviética, austera y de grandes proporciones, que las rodea.
Entre las obras de mayor tamaño encontramos la escultura de una vela a tamaño natural que ilumina a una pareja sentada dándose cariño (la vela se enciende cada día y se irá fundiendo poco a poco conforme avance la muestra) y una línea de nueve metros por la que los visitantes pueden caminar debajo, la versión ampliada y escultórica de un bosquejo que Fischer dibujó a mano. Del mismo modo que las líneas se convierten en arquitecturas, las fotografías que tomó en su jardín de Los Ángeles las ha trasladado a pinturas que introducen ficción en el paisaje original.
Small Axe no se presenta solo en el interior del centro, también en la Garage Square, donde Fischer exhibe el mayor proyecto colaborativo que ha realizado hasta ahora, titulado YES. Invita a personas muy variadas a crear un paisaje de esculturas de arcilla; la intervención de unos y otros hará que las obras se vayan metamorfoseando en el transcurso de la exposición, abierta hasta el 21 de agosto. Dos colaboradores del artista, Mina Stone y Alex Eagleton, prepararán comidas para los voluntarios y los participantes.
El creador, que reside en Nueva York, vuelve a recurrir aquí a la fragmentación, el desdoblamiento de los temas y la destrucción de materiales para conceder a sus trabajos nuevos sentidos críticos o carga ideológica. Busca, además, explorar al máximo las posibilidades objetuales y físicas que la escultura le ofrece.
