Sorolla, luces en Munich

Kunsthalle München presenta su primera retrospectiva alemana

Múnich,
Joaquín Sorolla. Madre, 1895-1900. Madrid, Museo Sorolla, Inv. No. 324
Joaquín Sorolla. Madre, 1895-1900. Madrid, Museo Sorolla, Inv. No. 324

El próximo 4 de marzo, Kunsthalle München abrirá al público “Joaquín Sorolla. Spain´s Master of Light”, primera retrospectiva del artista en Alemania. Consta de 120 pinturas en las que el valenciano demostró su virtuosismo en la captación de la luz propia del Mediterráneo, talento con el que dejó una profunda impresión en autores de su tiempo de la talla de Claude Monet y con el que alcanzó gran éxito, ya en vida, tanto en Europa como en Estados Unidos.

La exhibición recoge piezas de todas sus etapas, desde el realismo de corte social de sus comienzos hasta su cada vez mayor aproximación al Impresionismo y su progresiva lucidez en el manejo de la plasmación de la luz solar. La mayoría de las piezas expuestas son pinturas de gran formato en las que representó magistralmente el mar, su espuma y sus reflejos: entre ellas, escenas de niños jugando en la playa que fueron las que le granjearon el mayor número de alabanzas en el Salón de París por su captación, meticulosa y sensual, de la esencia del verano mediterráneo.

Paulatinamente, y sin dejar de inspirarse en paisajes españoles, Sorolla se decidió por abordar cada vez con mayor atrevimiento composiciones más modernas centradas técnicamente en la contraposición de tonalidades, y mientras llevaba a cabo estos paisajes naturales no dejó de demostrar también sus cualidades como retratista, de su esposa e hijos y de personajes influyentes que le requirieron.

Joaquín Sorolla. Instantánea, Biarritz, 1906. Museo Sorolla, Madrid, Inv. No. 776
Joaquín Sorolla. Instantánea, Biarritz, 1906. Museo Sorolla, Madrid, Inv. No. 776

 

Joaquín Sorolla. Regreso de la pesca, 1894. © RMN-Grand Palais (Musée d’Orsay) / Gérard Blot / Hervé Lewandowski
Joaquín Sorolla. Regreso de la pesca, 1894. © RMN-Grand Palais (Musée d’Orsay) / Gérard Blot / Hervé Lewandowski

Dejó patente en estas últimas pinturas su admiración por los retratos cortesanos de Velázquez y por el naturalismo de Adolph Menzel o Jules Bastien-Lepage, así como por la maestría en el tratamiento de la luz alcanzada por los impresionistas. También le influyeron los enfoques inusuales adoptados por algunos pioneros de la fotografía y las xilografías japonesas.

A quien no dejó de admirar fue a Whistler, y también se fijó en las imágenes apenas definidas de atmósferas deslumbrantes de pintores nórdicos como Anders Zorn.

Muchas de las obras expuestas formaron parte de la propia selección que Sorolla hizo a la hora de exponer en vida en capitales europeas, y también veremos bocetos al óleo cedidos por colecciones particulares. La mayoría se exhiben por primera vez en Alemania.

Entre los centros prestadores de esta muestra figuran el Museo Sorolla, el Prado, el Metropolitan Museum of Art de Nueva York o el Museo Nacional de Bellas Artes de La Habana.

Joaquín Sorolla. Trata de blancas, 1894. Madrid, Museo Sorolla, Inv. No. 320
Joaquín Sorolla. Trata de blancas, 1894. Madrid, Museo Sorolla, Inv. No. 320

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