Roma Años Setenta

Luigi Ontani. Pinocchio, 1972. Archivio L’Attico – Fabio

Una muestra en el Palazzo delle Esposizioni revisita el arte desarrollado en aquella década en torno a la capital italiana

Casi doscientas obras realizadas por un centenar de artistas componen la muestra “Anni ’70. Arte a Roma”, que hoy abre sus puertas en el Palazzo delle Esposizioni de esta ciudad y que explora la creación italiana de aquella década recordando la animada maraña de tendencias y enfoques artísticos, el peso de la identidad y la tradición propia y la apertura hacia novedades internacionales que convivieron en la ciudad.

Esta muestra supone una continuación de la serie de muestras y proyectos que el Palazzo delle Esposizioni lleva a cabo desde los noventa para examinar la creación desarrollada en Roma entre finales de la II Guerra Mundial y la década de los setenta.

Niele Toroni. Senza titolo, 1974. Collezione D’Alessandro, Roma

Los historiadores asociaban hasta ahora los setenta a una etapa de controversia y choque en lo artístico, pero los estudios más recientes permiten interpretarla como una década extremadamente fértil y constructiva. En particular en Roma, las artes visuales de entonces estuvieron marcadas por una pluralidad de enfoques que esta exhibición quiere ilustrar a partir de las últimas investigaciones.

Galerías y asociaciones culturales jugaron entonces un papel crucial en la promoción del arte italiano internacionalmente, destacando L’ Attico, La Tartaruga y La Salita; Graziella Lonardi fundó en 1970 los Encuentros Internacionales de Arte de la ciudad y tanto la Galleria Nazionale d´ Arte Moderna como el Palazzo delle Esposizioni comenzaron entonces su actividad expositiva. Se desarrolló en Roma un frenético programa de exposiciones, performances y debates que permitió a los artistas tomar de forma inmediata el pulso al impacto de su trabajo sobre el público en general.

Enrico Castellani. Superficie bianca, 1976. Archivio Castellani

La muestra se hace eco de las corrientes más significativas de los setenta en Italia: desde el arte povera a la escuela romana pasando por el arte conceptual o la transvanguardia, que tuvo en Roma su epicentro. Cada una de sus salas se ha programado conforme a un leitmotiv distinto.