Matta 1911-2011

Roberto Matta. Un soleil qui sait reunir, 1959

El IVAM conmemora el centenario del nacimiento del artista chileno mostrando una treintena de sus obras

“Matta 1911-2011”

INSTITUTO VALENCIANO DE ARTE MODERNO. IVAM
c/ Guillem Castro, 118
46003 Valencia
Del 15 de febrero al 1 de mayo de 2011
De martes a domingo, de 10:00 a 20:00 horas

Del 15 de febrero al 1 de mayo de 2011, en el Instituto Valenciano de Arte Moderno. IVAM

 

 

Comisaria: Marga Paz

 

 

Obras: 32

 

 

Organizan: IVAM, Museo de Bellas Artes de Bilbao, Sociedad Estatal de Acción Cultural

 

 

 

32 pinturas de Roberto Matta, varias de ellas de gran formato (incluyendo un tríptico y un políptico) se exponen en el IVAM para conmemorar el centenario del nacimiento del considerado último gran artista del Surrealismo. El chileno difundió este movimiento entre los creadores americanos de la Escuela de Nueva York y ejerció una decisiva influencia en el nacimiento y desarrollo del Expresionismo Abstracto norteamericano.

 

La producción de Roberto Matta aborda las relaciones entre arte, ciencia y naturaleza y se caracteriza por su infinidad de temas, formas, motivos y colores para configurar un lenguaje artístico difícilmente clasificable. Tras formarse en Arquitectura y trabajar en el estudio de Le Corbusier, Matta viajó por toda Europa entre 1935 y 1937 y, durante sus estancias en París, profundizó en las teóricas sobre física y psicoanálisis vigentes en la época; sus conocimientos de Freud le sirvieron para transmitir en su iconografía la nueva realidad del arte contemporáneo y la fuerza en él del inconsciente y la naturaleza.

 

Conoció a Dalí, Duchamp, García-Lorca y Breton, participó en la Exposición Internacional de París de 1936 y publicó en la revista Minotaure. Su conocimiento de la geometría no-Euclidiana y de las teorías matemáticas de Poincaré le sirvió para construir sus formas biomórficas y sus modelos circulares concéntricos en una articulación del espacio pictórico tan personal como indefinido e irracional.

 

 

En 1939 se trasladó a Nueva York, pero tras dejar una fuerte impronta en los impulsores del Expresionismo abstracto decidió, ya en 1948, instalarse en Roma. En 1957, el MoMA le brindó una gran retrospectiva que pudo contemplarse también en Minneapolis y Boston, y en 1985 protagonizó otra destacada exhibición individual en el Centre Pompidou.

 

 

 

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Roberto Matta

Vivre la mort, 1974

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Roberto Matta

Morphologie phychologique, 1939

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