El Real Patronato del Museo Reina Sofía anunció ayer el inicio de los trámites por los que el archivo de José María Lafuente, compuesto por cerca de 120.000 documentos en torno a arte moderno y contemporáneo, pasará a los fondos del MNCARS por un periodo prorrogable de diez años. Se trata de dibujos, libros, revistas, catálogos, manifiestos, panfletos, publicaciones efímeras, grabados, cartas, tarjetas, manuscritos, objetos, fotografías, imágenes y proyectos articulados en dos grandes secciones: arte de vanguardia español y europeo y tipografía, por un lado, y prácticas artísticas desde los sesenta en nuestro país y en Iberoamérica, por otro.
Hay que subrayar que la colección Lafuente incluye los archivos Westerdahl/Domínguez, Eugenio Granell, Escuela de Altamira y Dau al Set; colecciones completas de revistas de vanguardia bien conservadas, fondos relacionados con la Guerra Civil y el exilio, primeras ediciones, manuscritos, correspondencia y revistas completas sobre vanguardia latinoamericana, fondos de publicaciones del dadaísmo y el surrealismo europeo (Cabaret Voltaire, Dada, Cannibale, La Revolution Surréaliste, Minotaure )e impresos de los movimientos futurista y constructivista y de la Bauhaus. Lafuente también dona al MNCARS el archivo más representativo de la poesía experimental española desde los años 60, con obras de Elena Asíns, Felipe Boso, Isidoro Valcárcel y Eduardo Scala.
El Patronato ha señalado que la incorporación del archivo Lafuente a su colección permitirá dar continuidad a líneas de trabajo iniciadas por el Reina Sofía hace unos años y facilitará poder trabajar con archivos latinoamericanos que abordan temáticas semejantes, como los de Clemente Padín (en Uruguay), Juan Carlos Romero (en Argentina) o Mariotti (Perú).
Hace ya un año que el Museo Reina Sofía, José María Lafuente y la Secretaría de Estado de Cultura comenzaron a trabajar en la cesión de este archivo y su exposición en el Banco de España santaderino, dado el deseo de Lafuente de que su colección documental fuera accesible al público en la capital cántabra. El Gobierno de esa comunidad ha aportado precisamente ese edificio para albergarlo y se ocupará de su mantenimiento y acondicionamiento, mientras que el MNCARS asume la dirección técnica y de contenidos para garantizar la preservación, difusión e investigación de los documentos y también impulsará exposiciones temporales y debates a desarrollar en Santander: se busca que los fondos Lafuente compongan un archivo activo que dé, además, lugar a nuevas publicaciones.
Parte de los documentos donados ahora al Reina Sofía se expusieron en la Fundación March en 2012 con motivo de la muestra “La vanguardia aplicada” y otros forman parte de exposiciones aún abiertas al público, como “Kurt Schwitters. Vanguardia y publicidad” en el Museo de Arte Abstracto de Cuenca o “Escritura experimental en España: 1963-1983” en el Círculo de Bellas Artes de Madrid.
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