El director del Teatro Bolshoi, despedido
Escándalos y corrupción han sacudido en los últimos años el teatro Bolshói de Moscú y hoy han terminado por acabar con el despido de su director, Anatoli Iksánov, tras trece años de controvertida gestión.
Será sustituido por Vladímir Urin, hasta ahora director del teatro Stanislavski y Nemeróvich-Dánchenko.
Iksánov será desde ahora asesor en el Ministerio de Cultura pese a que el Ministerio de Interior denunciaba hace semanas el desfalco de 90 millones de rublos (unos 2,1 millones de euros) en las obras iniciadas con Iksákov en la dirección del teatro.
En marzo, la Audiencia de Cuentas de Rusia abrió una investigación sobre los gastos del Bolshói durante el ejercicio 2012 y la disciplina financiera de la dirección del teatro.
El pasado enero sufrió una brutal agresión el director de la compañía de ballet, Serguéi Filin, que fue rociado con ácido en la cara presuntamente por encargo de uno de alguien cercano al ex director, el bailarín Pável Dmitrichenko, actualmente en prisión.