A tenor de los estudios del Ministerio de Cultura, desde 2010-2011 se ha producido un incremento del volumen de población que en nuestro país visita monumentos o yacimientos. Este año se sitúa en un 42,8%, frente al 40,7% registrado hace cuatro años, y también crece un 1,5% el público que asiste anualmente a museos, exposiciones y galerías de arte, hasta representar el 39,4% de la población analizada (una muestra de 16.000 personas mayores de 15 años). Un 6,7% de los consultados ha accedido a sus visitas virtuales.
Las tasas más altas de participación cultural, en todas las áreas y también en las visitas a museos y monumentos, se producen entre los jóvenes, aunque el nivel de estudios continúa siendo la variable más determinante en la participación cultural.
Estudiando el resto de datos que ofrece la Encuesta de hábitos y prácticas culturales 2014-2015, una estadística oficial que se elabora cada cuatro años y que forma parte del Plan Estadístico Nacional, escuchar música, leer e ir al cine continúan siendo, por ese orden, las actividades culturales más frecuentes para la población española, y ha crecido la práctica de todas ellas en porcentajes que oscilan entre entre el 2,8 y el 4,9%.
Por detrás quedan la asistencia a espectáculos en directo, destacando entre ellos los conciertos de música actual (24,5%), el teatro (23,2%) y el circo (7,7%). El teatro está de (aún relativa) enhorabuena: la asistencia a las salas ha pasado del 19% registrado en 2010-2011 al 23,2% actual. Aumenta también el aforo de espectáculos de ballet o la danza, que pasa de 6,1% al 7%, o los conciertos de música clásica, que crecen del 7,7% al 8,6%, pero la ópera y la zarzuela continúan siendo nuestra asignatura pendiente: atraen a menos del 3% de la población.
Escuchar música, leer e ir al cine continúan siendo, por ese orden, las actividades culturales más frecuentes para la población española
En cuanto a la lectura, el 62,2% de la población analizada lee al menos un libro al año, cifra que supone un ascenso de 3,5 puntos en los últimos cuatro años. Un porcentaje aún más significativo lo ofrece el crecimiento de lectores digitales: suponen un 17,7% frente al 6,5% de 2011, pero el papel sigue siendo el soporte favorito para el 59% de quienes leen.
Unas actividades culturales nos llevan a otras: los colectivos que participan en una determinada actividad cultural participan también por encima de la media en las restantes de forma casi sistemática. Por ejemplo, las tasas de lectura anual superan el 85% entre aquellos que asisten cada año a espectáculos en directo de artes escénicas, o la población que visita anualmente algún museo, exposición o galería presenta tasas de asistencia anual al teatro del 44,4%.
También podemos relacionar el consumo de nuevas tecnologías y el acercamiento a la cultura, porque entre quienes suelen utilizar el ordenador (al menos una vez a la semana) es mucho más frecuente la asistencia a espectáculos culturales en directo, al cine (72,3%) o la afición por la música (95,3%).
