Siete exquisitos dibujos de la colección del Museo del Prado

De José de Ribera a Francisco Bayeu

Madrid,
José de Madrazo y Agudo. Estudio de pierna masculina derecha, siglo XIX
José de Madrazo y Agudo. Estudio de pierna masculina derecha, siglo XIX

La muestra dedicada al Ribera dibujante que hasta el 19 de febrero puede verse en el Museo del Prado nos ha hecho pensar que nos gustaría conocer mucho más la colección de dibujos, estampas y fotografías de la pinacoteca, uno de los mejores (o el mejor) fondo de España en esta materia en calidad y cantidad: dibujos españoles e italianos, la extensa producción goyesca, fotografías documentales de las obras artísticas del Museo y de la escuela romana del s XIX…

Como aperitivo e invitación a saber más, os proponemos prestar atención a estos siete dibujos tan exquisitamente virtuosos como visualmente modernos:

José de Madrazo y Agudo. Estudio de pierna masculina derecha, siglo XIX

Este carboncillo sobre papel de José de Madrazo tiene carácter preparatorio: lo utilizó para la composición de La disputa entre griegos y troyanos por el cuerpo de Patroclo, de la que en el Prado podemos ver un modellino. El artista dejaba aquí claro su dominio de las enseñanzas académicas que había recibido en su juventud representando fragmentos de figuras a una proporción superior al tamaño natural; el resultado es tan perfecto en lo técnico como hoy moderno, porque aunque se trate de un preparatorio nos evoca esas obras que se concibieron inacabadas de inicio, la cultura de la ruina que se venía gestando desde el s XVIII.

El Prado posee más estudios de José de Madrazo para La disputa, casi todos a carboncillo y algunos iluminados con clarión, pero este nos gusta especialmente por el modelado de la pierna. ¿Y dónde encontrarla en la obra definitiva? En el guerrero de la derecha de los dos que luchan por el cuerpo del héroe Patroclo, seguramente. Estas piernas tienen mucho de escultórico. Por cierto, la pintura acabada se realizó para Napoleón.

Francisco Bayeu. Cautivo, 1779

¿No tiene este Cautivo de Bayeu un gesto de cansancio algo similar al del Jovellanos retratado por Goya? También estamos ante un dibujo preparatorio, este para la figura que ocupaba el ángulo inferior derecho del fresco del Milagro o La delación de Santa Casilda en el claustro de la Catedral de Toledo. Su cabeza inclinada y apoyada en la mano izquierda resulta exquisitamente expresiva, como la postura cansada de las piernas del modelo. Este dibujo, realizado con clarión y sanguina, tiene origen en la Colección Real.

Francisco Bayeu. Cautivo, 1779
Francisco Bayeu. Cautivo, 1779

 

Lorenzo Tiépolo. Joven fumando, 1770-1779

¿Conocéis los pasteles de tipos populares que Lorenzo Tiépolo, hijo de Giambattista, hizo en Madrid? Se trata de retratos de medio cuerpo de figuras castizas que parecen interpelar con su gesto al espectador o a otros personajes de la composición. Con ellos podemos relacionar este dibujo, de clarión y sanguina sobre papel verdoso, preparatorio para un retrato de Hombre con pipa y otras figuras que pertenece a una colección privada y que pudo verse por primera vez, precisamente en el Prado, en 1999. El retrato definitivo es un pastel sobre papel y el resultado se acercaba bastante a este, porque la sanguina y el clarión permiten recrear bastante bien las cualidades del pastel. A su llegada a Madrid, Lorenzo Tiépolo no tuvo competidor en esa técnica.

Niccolo Lapiccola. Estudios de cuerpo infantil, siglo XVIII

Lappicola no es un pintor muy conocido, aunque recibiera en 1750 el premio de la Academia de San Lucas y fuera académico de esa misma institución (también alumno de Fancini). No nos ha llegado demasiada obra suya, pero la que conocemos es estilísticamente semejante a este dibujo, de clara tendencia académica romana. Con lápiz negro y sanguina sobre papel agarbanzado ejecutó estos apuntes de brazo izquierdo y pierna izquierda en distintas actitudes. Todo delicadeza.

Filippo Bellini. Descendimiento de la Cruz, s XVI

Este desnudo bajando una escalera que está descendiendo de la cruz, ejemplo del estilo elegante de Bellini, es una copia de un célebre retablo que Barocci llevó a cabo para la Catedral de Perugia a mediados del s XVI, entre 1566 y 1569.

Cecilio Pizarro y Librado. Apunte de una mano, 1840-1847

Este dibujo del artista toledano Cecilio Pizarro forma parte de un álbum con casi trescientas obras suyas sobre papel que el Prado adquirió en 2009. Pizarro lo llevó a cabo directamente sobre una página del álbum, en su margen derecho. Fue pintor, dibujante, aguafortista, litógrafo, y restaurador y dibujó más monumentos que estudios corporales, pero en estos también demostraba finura.

José de Ribera. Escena fantástica: caballero con hombrecillos encaramándose a su cuerpo, 1627-1630

Esta obra forma parte de la muestra del Ribera dibujante que actualmente podemos visitar en el Prado y da fe de la enorme libertad, autonomía y modernidad de este artista cuando dibujaba. Sin Italia esta originalidad no habría sido posible: además de tipos y escenas reales, Il El Españoleto diseñó composiciones tan imaginativas como esta, intensamente expresivas, con cuerpos distorsionados. Como su contemporáneo Jacques Callot, Riberá dibujó personajes extravagantes: este gigante es el contrapunto a los enanos de aquel y por su indumentaria recuerda a los personajes de la Comedia del Arte.

Comentarios