Markus Linnenbrinck y el color que conmueve

Bajo el título de “THEGRASSISALWAYSGREENER”, el artista de Dortmund establecido en Nueva York Markus Linnenbrink presenta, hasta el 17 de enero de 2015, su segunda muestra individual en la Galería Max Estrella. Las obras recientes de las que consta la exposición destacan por la vigorosa presencia del color: vibrante y puro, a menudo lleno de luz, y empleado con intenciones comunicativas, en el marco de su habitual relación con estados de ánimo.

En algunos trabajos, de gran formato, pigmentos disueltos en resina epoxi se deslizan lentamente hacia abajo dando lugar a franjas verticales; en otras piezas, la perforación de pequeños cráteres revela las capas de pintura subyecentes dentro de un procedimiento que podría remitir a la arqueología, y, gracias a una intervención site-specific que cubre el suelo, las paredes y el techo de Max Estrella, toda la arquitectura de la sala presenta rayas de colores iridiscentes que modifican nuestra percepción del espacio, sometiéndonos casi a una audaz hipnosis.

Además de ese uso por parte de Linnenbrick de las cualidades conmovedoras del color, de su capacidad para relajarnos o estimularnos, el artista también dota a sus obras de un evidente toque performativo que se hace presente cuando, como hemos comentado, vierte la resina pigmentada en el soporte, perfora agujeros en las capas de pintura endurecida y ofrece espacios de color en instalaciones murales que nos hacen pasar de las dos a las tres dimensiones ansiadas por Lucio Fontana.

Abonado a la transgresión de géneros tan definitoria para muchos artistas de su generación, Linnenbrinck ha trabajado a menudo con fotografías sobre las que aplica, a modo de dripping, las mencionadas líneas verticales semejantes a lágrimas de resina de epoxy, gruesas, que añaden un plus de expresividad a imágenes de retratos que parecen extraídas de álbumes familiares: en su caso fueron tomadas por su padre o han sido extraídas del iPhone del artista, que aparece en algunas.

Buscad sus obras en las colecciones de Deutsche Bank y Commerzbank, Olor Visual, el Herzliya Museum of Art Israel, el San Francisco Museum of Moden Art, el Center Court de La Haya o la Philadelphia Academy of Fine Art Museum.