La réplica infiel

Anna Boghiguian, Saskia Calderón, Sunah Choi, Bojana Cvejić, Virginia de Medeiros, Carla Filipe, Isaías Griñolo, Julio Jara, Teresa Lanceta, Xavier Le Roy, Xisco Mensua, Anna Oppermann, Nacho París, Inmaculada Salinas, Mladen Stilinović y Scarlet Yu son los artistas que participan, desde el próximo 18 de marzo, en “La réplica infiel”, nueva exposición del Centro de Arte Dos de Mayo de Móstoles.

La han comisariado Nuria Enguita y Nacho París y planteará hasta qué punto la producción de imágenes artísticas en Europa y América está unida a intereses religiosos, políticos, a fines exteriores o mágicos, a pesar de que, llegada la modernidad, pudiéramos pensar que tanto las propias obras de arte como el acto de crear y el hecho expositivo parecieran haber alcanzado su autonomía.

“La réplica infiel” cuestionará si el arte hoy ha alcanzado por fin voz propia a la hora de interrogar el sentido de la realidad o si simplemente ha sido relegado a un espacio social institucionalizado y ajeno a las creencias colectivas, a la experiencia de la vida. Como si se hubiera transformado meramente en un hecho autorreferencial.

Tanto la exposición, que el día 17 tendrá su preludio en una conferencia de Tomás Pollán y en tres performances de Julio Jara, Saskia Calderón y Sunah Choi, como su catálogo, con textos de Bojana Cvejić, Nuria Enguita, Laurence Rassel, Nacho París y Willy Thayer, abordarán la condición de la obra de arte y sus posibilidades, en qué hubiera podido convertirse y en qué se ha convertido.

La reflexión en torno a realidad y representación y en torno al acto artístico como conocimiento que propone el CA2M en “La réplica infiel” tendrá implicaciones tanto éticas como políticas que surgirán ineludiblemente a la hora de formular preguntas sobre los vínculos entre arte y sociedad y entre arte y poder y sobre la validez de su lenguaje para construir significados.

Si la noción de réplica puede definirse como reproducción de las formas y como una contestación de las ideas, también puede entenderse como una respuesta y una copia pretendidamente idéntica.

De este modo, la  “réplica infiel” no podría ser exacta a la idea originaria y a lo mejor ni siquiera una opción que crea en ella: se le desea un recorrido propio más allá de las razones de su origen.

La muestra no nos propondrá un manual de instrucciones ni un único recorrido, sino una heterogeneidad de trabajos y voces reunidas que abren distintos horizontes de sentido en un proyecto que se interroga sobre la potencia del arte en tanto que acto de habla e invención, en combate desde y contra su propio método.