El archivo de Lucian Freud, compuesto por bocetos, dibujos y correspondencia y atesorado hasta ahora por el Legado del pintor, ha pasado a manos del Estado británico a través de la fórmula de la dación en pago. Ya sabemos cuál será su sede permanente: la National Portrait Gallery de Londres, que en 2012 dedicó a los retratos de este artista una amplia exposición, la más visitada por ahora en la historia de este museo.
Hasta ahora las obras y documentos que componen este archivo no habían sido publicados ni mostrados al público, y la NPG planea hacerlo: una primera selección de los mismos podrá contemplarse seguramente a partir del verano de 2016.
El archivo completará las obras relacionadas con el pintor de la carnalidad que ya posee la National Portrait Gallery: un autorretrato al óleo de 1963, un dibujo al carboncillo, un grabado en el que Auerbach retrató al artista y otros retratos fotográficos suyos a cargo de David Dawson, Bruce Bernard o Cecil Beaton, entre otros.
Los cuadernos de bocetos de Freud incluyen trabajos realizados desde los cuarenta hasta su muerte en 2011 y proporcionan una valiosa información sobre sus procedimientos de trabajo. Uno de esos cuadernos contiene dibujos de Caroline Blackwood que remiten a una de las primeras grandes obras del inglés, Hotel Bedroom, de 1954. Otros los utilizo probablemente como punto de partida para desarrollar sus retratos o sus diseños de cubiertas de libros, como las de Cards of Identity de Nigel Dennis o Hideous Kinky, de su hija Esther Freud.
También será interesante prestar atención, cuando la National Portrait Gallery nos los enseñe, a los dibujos que Lucian hizo durante su infancia en Alemania, antes de huir a Inglaterra en 1933 tras la llegada al poder de Hitler. Su madre fue quien se ocupó de conservarlos y de anotar en ellos fecha y lugar de realización. Proporcionan mucha información sobre la vida familiar de aquella primera etapa del camino de Freud.
