La gran conspiración: AECID y la Academia de España en Roma presentan su segundo proyecto online

Agnès Pe, Clara Montoya, Francesc Ruiz, Marc Vives y Paco Chanivet presentan obras creadas específicamente para la red

Roma,

Hace unas semanas os hablamos de Reactivando videografías, muestra virtual dedicada al videoarte y compuesta por trabajos de setenta autores que constituía el primer capítulo del proyecto Ventana, puesto en marcha por AECID y la Academia de España en Roma para favorecer la internacionalización de los contenidos virtuales de los artistas, creadores e industrias culturales españoles y el fomento de la colaboración creativa y el trabajo en red, principalmente por medios digitales.

Su segundo episodio acaba de presentarse, lleva por nombre La gran conspiración y se ha concebido como espacio de experimentación para las prácticas artísticas virtuales bajo el comisariado de Manuela Pedrón Nicolau y Jaime González Cela. Esta vez han colaborado en la muestra las Consejerías Culturales de España en Bruselas, Washington, Londres, Lisboa y el Centro Cultural de España de Montevideo y se completará, además, con un programa de mesas redondas en formato online y presencial en el primer trimestre del año que viene.

Consta, La gran conspiración, de creaciones concebidas para la red a cargo de Agnès Pe, Clara Montoya, Francesc Ruiz, Marc Vives y Paco Chanivet; se trata de trabajos que, en estos tiempos de distancia y pandemia, nos invitan a reflexionar sobre cómo se desarrollan hoy nuestras relaciones y contactos y también sobre nuestras actuales vías de conocimiento, en uno y otro caso atendiendo especialmente al imperio y las lógicas de la telecomunicación.

Esas telecomunicaciones también han servido para que las instituciones que han participado en el proyecto lo pusieran en marcha y para que nosotros, sus destinatarios, podamos acceder a él en más de una ocasión, porque parte de la esencia de La gran conspiración es el cambio y la expansión. Ángeles Albert, directora de la Academia de España en Roma, nos propone regresar cuanto queramos: Invitamos a todo el mundo a que visite el proyecto varias veces, porque hay que jugar con él, y en su ADN está el mutar, el cambiar, el crecer. Este proyecto da un impulso a lo digital, que a partir de ahora tendrá que convivir con lo presencial.

Además, algo tiene la exposición de elige tu propia aventura: el site se despliega en un recorrido de múltiples posibilidades que permite navegar por las piezas y contenidos. Se trata de un espacio virtual que no replica las condiciones del espacio expositivo físico y tampoco responde a las estructuras habituales de las webs comerciales, sino que se modifica en cada visita según el lugar y la hora desde los que se accede, y se estructura a partir de posiciones relativas atendiendo a la red de ciudades que da forma al proyecto. Así, el lugar de la muestra visibiliza cómo nuestras acciones en Internet dejan un rastro de datos: los contenidos se despliegan en distintas capas de lectura, animando a una navegación activa, a una experiencia diferente en la pantalla. No faltarán los easter eggs, que guardan mensajes ocultos.

Las cinco obras que lo articulan se fechan este mismo año y tienen como común denominador la visibilización de ciertos mecanismos ocultos de Internet, que por la saturación y la esencia inmaterial de la Red nos pasan desapercibidos. Clara Montoya nos presenta Nómadas, una aproximación a los procedimientos de la cartografía digital para explorar cómo se accede a lugares distantes por el camino de la imagen; Agnès Pe ha estudiado el papel de la publicidad en la historia de la red, actualizando uno de los hitos de la mercantilización de Internet y Marc Vives ha mezclado archivos sonoros encontrados en la red para llamar nuestra atención sobre la saturación visual.

Clara Montoya. Nómadas
Clara Montoya. Nómadas

Paco Chanivet, por su parte, nos propone saltos entre lo virtual y lo físico a través de recursos narrativos propios de la ciencia ficción, la sugestión o la hiperstición y, por último, Francesc Ruiz ha diseñado diversos materiales y acciones que podrían poner a prueba la logística de los sistemas de correos nacionales.

Francesc Ruiz. Correos
Francesc Ruiz. Correos

El título tiene mucho que ver con el propio crecimiento en red de La gran conspiración; lo explican los comisarios: El título de esta muestra juega con el funcionamiento de internet. No tiene el sentido de querer derrocar a nadie, pero sí conlleva una reflexión sobre cómo pensar el arte en internet y el acceso al mismo. La Gran Conspiración ofrece la posibilidad de experimentar con propuestas artísticas a distancia. Presenta un conjunto de obras que utilizan las lógicas de la comunicación en Internet y otras posibilidades de distribución: no queríamos imitar lo que es un museo, queríamos ir más allá. Esta exposición tiene un carácter experimental, porque nos ha colocado en un lugar que, de primeras, no era nuestro y que ha experimentado con el propio formato. Cuando iniciamos el diálogo con los artistas queríamos saber qué formas puede tener el arte a distancia.

Como decíamos, la presentación en red de La gran conspiración se acompaña de encuentros virtuales que se prolongarán durante el primer trimestre del año que viene y, además, cada una de las Consejerías Culturales de España en Bruselas, Lisboa, Londres y Washington, y el Centro Cultural de España en Montevideo, acogerán charlas de los artistas participantes en el proyecto, que conversarán con creadores residentes en estas ciudades.

En último término, La Gran Conspiración se inscribe en la estela de las prácticas artísticas distribuidas que incluye el mail art o el net art: iniciativas vinculadas a la expansión de la obra de arte y al abordaje de los diversos aspectos que la forman y rodean. Se conecta la noción de distribución con la idea de crear piezas que no sean únicas sino múltiples, a través de la capacidad de reproducirlas. Nos presenta un tipo de arte cuya esencia no radica en su exclusividad, sino en el alcance social de la misma; también se conectan las prácticas artísticas distribuidas con el tráfico global de productos e ideas mediante vías alternativas de divulgación.

A La gran conspiración puede accederse aquí: www.lagranconspiracion.com

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