Javier Viver, la nostalgia y la muerte

El artista presenta en el Museo Lázaro un proyecto que enlaza arte de ayer y hoy a partir de las emociones

Madrid,

El último artista en reinterpretar las colecciones del Museo Lázaro Galdiano de Madrid es el madrileño Javier Viver, pero su proyecto, que se ha presentado hoy en este centro, no supone “solo” una relectura más de estos fondos, sino también una recuperación de alguna de sus obras pasadas, como la serie de imágenes Révélations, dedicada a los internos en el psiquiátrico parisino de La Salpêtrière, y se acompaña de la presentación de otro trabajo específico que podrá contemplarse desde el 13 de febrero en la Capilla de los Arquitectos de la Iglesia de San Sebastián, obra de Ventura Rodríguez, y estará vinculado a su arquitectura.

Javier Viver. "Museo de pasiones" en el Museo Lázaro Galdiano
Javier Viver. “Museo de pasiones” en el Museo Lázaro Galdiano

La muestra abierta en el Lázaro Galdiano lleva por título “Museo de Pasiones” y teje lazos, sala a sala (en casi todas), entre las piezas que forman parte de la colección permanente de este espacio y las fotografías de La Salpêtrière a partir de las emociones, que Viver considera el eje inmaterial que vertebra el desarrollo de la Historia del Arte, más allá de cuestiones teóricas y formales. También podremos ver fotografías del último libro en el que este autor ha trabajado, Cristos y anticristos, dedicado al tratamiento de las imágenes durante nuestra Guerra Civil, pero la obra central de la exposición, ubicada en el Salón de Baile, es la monumental escultura La mujer de Lot, de seis metros de altura, elaborada con sal pétrea y dedicada a la figura bíblica de Edit, que como sabemos fue convertida en estatua (de sal) como castigo por mirar atrás, hacia Sodoma, después de que Dios les advirtiera que la ciudad iba a ser destruida junto con Gomorra.

Esta pieza, que tiene mucho que ver con la labor de Viver como imaginero, quehacer que ha solapado a su rol como fotógrafo, hace referencia a las miradas universales hacia el pasado, hacia la nostalgia que petrifica y no permite avanzar, reflexión que el artista consideró oportuna en un centro cuyo acervo es eminentemente clásico (pero que una y otra vez mira hacia adelante y se abre a reinterpretaciones). No es la única escultura presente en “Museo de Pasiones”: también saldrán a nuestro paso otras figuras humanas y no representativas de la producción imaginera de Viver que dialogan con los fondos del Lázaro.

Las fotografías expuestas que mencionábamos tienen mucho que ver con ese relato de Edit y con nuestros modos de aproximarnos al pasado: entiende Viver que, al igual que la escultura puede implicar la fosilización del modelo, la fotografía supone la congelación de momentos. Y aún más, enlaza unas y otras al referirse al gran asunto de fondo del poder que concedemos a las imágenes, ayer y hoy: las hemos dotado de una extraordinaria capacidad representativa y transformadora a través de un simbolismo del que por sí mismas carecen. En el proceso creativo de fotos y esculturas encuentra también nexos el artista: las primeras nacen de huellas que generan luz y queman superficies: las segundas dan igualmente lugar a ficciones, en su caso a través de moldes del natural.

Los trabajos que forman parte de Révélations, serie materializada en un fotolibro que en 2015 obtuvo el Premio Nacional al Mejor Libro de Arte, se exhiben impresas sobre lonas de grandes dimensiones o mostrando los mismos pliegos del libro y, en muchos casos, representan una taxonomía de estados de locura conforme a criterios ilustrados y atendiendo a sus causas. Curiosamente, sus poses se asemejan a las de algunos retratados en obras del Lázaro Galdiano que abordan asuntos similares. Por su parte, las que integran Cristos y Anticristos, fotolibro coeditado con RM, parten de una intervención sobre un Evangelio de San Mateo de 1930 ilustrado con escenas de la citada Guerra Civil. El volumen será presentado en el Museo durante la exposición.

De la intervención de Viver en la Capilla de los Arquitectos, titulada Un corazón que late, sabemos que estará formada por siete murales de gran tamaño (en algunos casos, de hasta nueve metros de altura) que se situarán en los huecos laterales y frontales del templo y por una nueva escultura de la mujer de Lot, esta ya a escala real, que se dispondrá bajo el eje de la cúpula.

Otras actividades relacionadas completarán la doble propuesta de Viver: visitas guiadas en el Lázaro Galdiano los sábados a las 12:30 horas, a cargo de alumnos de Bellas Artes de la Universidad Francisco de Vitoria (en la Capilla se desarrollarán los miércoles, a las 19:00 horas, y los sábados, a las 11:00 horas); un programa de conciertos de música sacra contemporánea en la Capilla, del 13 de febrero al 2 de mayo, y, por último, el cuarto simposio Transcendencia y Espiritualidad en el Arte Contemporáneo, a celebrarse en la Escuela de Negocios ADEN, dependiente de la Universidad Francisco de Vitoria y situada en la calle Orense. Tendrá lugar el 18 de marzo y contará con la participación de Mercè Gambús, Carmen Espinosa, Pablo López Raso, Benjamín Cano Domínguez y el propio Javier Viver.

Javier Viver. "Museo de pasiones" en el Museo Lázaro Galdiano
Javier Viver. “Museo de pasiones” en el Museo Lázaro Galdiano

 

Javier Viver. “Museo de pasiones”

MUSEO LÁZARO GALDIANO

c/ Serrano, 122

Madrid

Del 5 de febrero al 4 de mayo de 2020

 

CAPILLA DE LOS ARQUITECTOS

c/ Atocha, 39

Madrid

Del 13 de febrero al 4 de mayo de 2020

 

 

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