Iwan Baan contra la fría foto de arquitectura

El Museo ICO dedica al holandés una retrospectiva

Madrid,

Es posible que su nombre no suene a muchos, pero es más raro que sus imágenes no resulten familiares: casi todas las exposiciones recientes de fotografía dedicada a la arquitectura contemporánea (también algunas del Museo ICO) han contado con trabajos del holandés Iwan Baan. Se trata de una de las grandes figuras en este campo desde hace veinte años, pese a que su formación y primeros pasos tuvieron que ver con la foto documental; las arquitecturas fueron incorporándose a su producción de forma muy natural, como trasfondo de vidas, y paulatinamente han ganado peso en sus intereses, pero siempre vinculadas a la transmisión de historias, a una concepción humanista de los espacios y de sus usos.

Tuvo relación, con ese viraje parcial hacia las construcciones, su contacto en 2004 con Rem Koolhaas, entonces inmerso en un proyecto de exposición junto a su amigo Lok Jansen (les propuso incluir en esa muestra panorámicas en 360º); fue en esos años cuando Baan, nacido en 1975 en Alkmaar, detectó, en sus palabras, que la arquitectura era un campo en el que podía conectar todos sus intereses e inquietudes en torno a personas, lugares y entornos; sobre la relación de unos y otros y los efectos del transcurso del tiempo y de la huella humana sobre los edificios una vez que sus artífices han culminado su labor.

Iwan Baan. Museo de Arte de Teshima, Tonosho, Japón, 2010. Arquitectura: Ryue Nishizawa
Iwan Baan. Museo de Arte de Teshima, Tonosho, Japón, 2010. Arquitectura: Ryue Nishizawa

Tras su paso por el Vitra Design Museum alemán, donde pudo verse hasta marzo, ha recalado ahora en el Museo ICO madrileño, dentro de la programación de PHotoESPAÑA, su retrospectiva “Instantes en la arquitectura”, que podemos aventurar que seducirá a un público más amplio que el que habitualmente visita este tipo de muestras por su ausencia absoluta de frialdad: frente a las composiciones idealizadas, carentes a menudo de figuras humanas y tomadas en condiciones lumínicas meticulosamente escogidas, la obra de Baan destaca por su frescura y espontaneidad, por su capacidad evocadora e, incluso, por su ternura y su sentido del humor; ha trabajado a menudo por encargo, documentando las creaciones de arquitectos internacionales, pero también ha desarrollado en todo el mundo proyectos propios que dejan patente su atracción por las construcciones efímeras, populares, de nuevo espontáneas, y por aquellas ligadas a tradiciones y ritos cuya supervivencia hoy tiene todo el sentido y, a su vez, resulta un milagro.

En los veinte años transcurridos desde que emprendió el holandés ese nuevo camino, su cuerpo de trabajo ha sido ingente: para esta exhibición, propuso a la comisaria Mea Hoffmann hasta 4.000 posibles piezas (solo una pequeña porción de su archivo) y, efectivamente, el recorrido es denso en imágenes, pero su montaje, diverso en sus distintas secciones y en ocasiones en forma de collage, incita a olvidar la prisa y a contemplar todas las construcciones y urbanismos recogidos con una mirada entre filosófica y sociológica (suele tomar vistas aéreas, para contextualizar, antes de fijarse en lo pequeño y en el relato humano).

Iwan Baan. Museo Nacional de Catar, Doha, Catar, 2019. Arquitectura: Ateliers Jean Nouvel
Iwan Baan. Museo Nacional de Qatar- Doha, Qatar, 2019. Arquitectura: Ateliers Jean Nouvel

“Instantes en la arquitectura” es, ante todo, una muestra fotográfica, y delata en Baan un estilo muy personal, pero por su arco temporal supone también un retrato de la arquitectura desarrollada en lo que llevamos de siglo XXI, periodo breve pero intenso en todos los niveles, en el que comenzamos ensalzando a arquitectos estrella para, después, mirar con cierto escepticismo el fenómeno de la celebridad y defender una concepción más participativa, colaborativa o democrática de este oficio; esta última noción se hace clara en los proyectos recogidos de Francis Kéré, Anna Heringer o MASS Design Group (a los dos primeros también hemos podido conocerlos bien en este centro).

Respondiendo, en parte, a una evolución semejante, Baan no altera el entorno a la hora de trabajar, sino que capta la vida, el dinamismo e incluso la fe en torno a los edificios que fotografía; por esa misma razón, pasa bastante desapercibido allí donde va y solo emplea cámaras de mano y útiles básicos, nada de trípode. La representación de lo que muta no requiere, en su disciplina, grandes medios, sino una mirada. Por todas estas razones es fácil comprender que esquive la etiqueta de “fotógrafo de arquitectura” por preferir la de fotógrafo sin más: se considera un narrador visual que registra lugares donde ocurren sucesos cotidianos o ritos cíclicos, espacios que se dejan contaminar por quienes los habitan y que responden a sus necesidades más básicas o espirituales.

Iwan Baan. Filarmónica del Elba, Hamburgo, Alemania, 2017. Arquitectura: Herzog & de Meuron
Iwan Baan. Filarmónica del Elba, Hamburgo, Alemania, 2017. Arquitectura: Herzog & de Meuron

Una primera sección, Perspectivas, recoge fotografías tomadas por encargo y dedicadas a construcciones recientes de diferentes arquitectos internacionales, edificios que responden a cánones más o menos consolidados pero que no son retratados como asépticas obras de arte habitables sino como escenarios de disfrute, trabajo o vida diaria (entre ellos se han escogido dos ejemplos españoles, ambos del dúo SelgasCano: el Palacio de Congresos y Exposiciones de Plasencia y el Auditorio y Palacio de Congresos El Batel de Cartagena).

La segunda está dedicada a sus proyectos en China, incidiéndose en dos: su documentación del proceso de construcción del antirrascacielos de la CCTV en Pekín, a cargo de OMA, desde el vertido de hormigón para los cimientos a las decenas de miles de trabajadores que, durante meses, residieron en asentamientos provisionales junto a las obras; y la del Estadio Nacional de la capital china, diseñado por Herzog & de Meuron para los Juegos Olímpicos de 2008, cuando este país aún parecía iniciar una etapa de apertura al mundo. En este caso, también fotografió Baan a los miles de empleados que lograron finalizarlo a tiempo con enorme esfuerzo y escasa maquinaria, muchos de ellos migrantes llegados de áreas muy alejadas de lo que este estadio y su planteamiento innovador invocan.

Iwan Baan. Estadio Nacional, Pekín, China, 2008. Arquitectura: Herzog & de Meuron
Iwan Baan. Estadio Nacional, Pekín, China, 2008. Arquitectura: Herzog & de Meuron
 Iwan Baan. Sede de la CCTV, Pekín, China, 2011. Arquitectura: OMA
Iwan Baan. Sede de la CCTV, Pekín, China, 2011. Arquitectura: OMA

Ese estudio amplio, abierto a lo habitualmente oculto, de lo que un gran proyecto arquitectónico implica, tiene su continuidad en los dos apartados que culminan esta antología, en los que se despliegan, en imágenes de distintos formatos y vídeos, trabajos dedicados a técnicas constructivas tradicionales, a las viviendas informales o precarias nacidas de la urgencia o a prácticas que hoy pueden resultarnos arcaicas, pero que allí donde surgieron no han perdido vigencia, a diferencia de otras quizá más recientes, por responder a exigencias básicas que no se han extinguido.

Iwan Baan. Instantes en la arquitectura. Museo ICO, 2024. Fotografía: José Luis de la Parra
Iwan Baan. Instantes en la arquitectura. Museo ICO, 2024. Fotografía: José Luis de la Parra

En estas instantáneas veremos vitalidad, a veces armonía, a veces caos; y mucha diversidad: el viaje es un motor importante en la trayectoria de Baan. Pueden contemplarse imágenes de las iglesias coptas, sobrecogedoras, excavadas en la meseta de Lalibela (Etiopía) hace ocho siglos, creadas a partir de la sustracción de material, no desde su adición. No ascienden hacia el cielo, como la gran mayoría de los templos, sino que se localizan en lo profundo del terreno, y es necesario caminar por surcos y gargantas para acceder a ellas.

También veremos fotografías de las construcciones efímeras (de bambú, textiles varios) que conmemoran la festividad hinduista de Kumbh Mela, en Prayagraj (India): componen una ciudad breve del tamaño de Manhattan y reciben decenas de millones de visitantes, allí donde confluyen el Ganges y el Yamuna. En uso continúan, para el almacenamiento de agua y en este mismo país, cisternas escalonadas en las que siguen entrando en relación estrecha la tierra, el elemento líquido y los seres humanos. Se ha interesado igualmente, el fotógrafo holandés, por las construcciones en adobe de Bangladesh y de Burkina Faso (y por todas las soluciones de aislamiento térmico y lumínico que el barro aporta); por los templos que cíclicamente y con cuidada armonía se levantan en Ise (Japón), en madera de ciprés y cada veinte años; o por las similitudes entre Roma y Las Vegas. Miles de años las separan, el turismo de masas las acerca.

Iwan Baan. Tiébélé, Burkina Faso, 2021 © Iwan Baan
Iwan Baan. Tiébélé, Burkina Faso, 2021 © Iwan Baan
Iwan Baan. Instantes en la arquitectura. Museo ICO, 2024. Fotografía: José Luis de la Parra
Iwan Baan. Instantes en la arquitectura. Museo ICO, 2024. Fotografía: José Luis de la Parra

 

 

Iwan Baan. “Instantes en la arquitectura”

MUSEO ICO

C/ Zorrilla, 3

Madrid

Del 7 de junio al 8 de septiembre de 2024

 

Comentarios