Ildefonso Aguilar y el Lanzarote posible

La APGallery, la nueva galería abierta en Martín Muñoz de Ayllón (Segovia) que nació con la vocación de ofrecer al público una experiencia distinta en la contemplación de obras de arte, asociándola al paisaje y convirtiéndola en una vivencia a la vez sensorial e intelectual, presenta en esa línea, desde el 16 de mayo, el proyecto de Ildefonso Aguilar “Paisajes posibles”.

Aguilar, salmantino que ha residido siempre en Lanzarote, ha vinculado habitualmente sus trabajos, multidisciplinares, a la naturaleza de esa isla canaria y, más recientemente, también al de Islandia. Los paisajes lanzaroteños, para el pintor, son capaces de generar emociones puras y siempre intensas que trasladan a quien los contempla a un mundo primitivo y natural donde la soledad es capaz de llenar espacios.

 

La mayor parte de su producción es pictórica (paisajes austeros de gran expresividad y minimalistas en sus formas) en los que recoge sublimándola la geología de Lanzarote. Ha utilizado para ello arenas naturales de la isla que confieren a sus obras matices y texturas muy característicos que no podría obtener por otros medios.

Aguilar también es autor de composiciones acústicas que buscan transmitir la presencia vital del viento y el agua en los paisajes de Lanzarote (es responsable de la ambientación musical de Los Jameos del Agua, la Ruta de los Volcanes, la Cueva de los Verdes y el  Jardín de Cactus y en 1989 creó el Festival de Música visual de Lanzarote, que dirige hasta su última edición en 2002), así como de fotografías que transmiten quietud y soledad y de instalaciones de imagen y sonido que aluden a otros aspectos de su obra, como sus escenografías o sus intervenciones en el paisaje natural: el artista trabajó en su momento junto a César Manrique, y finalizó la segunda fase del Centro de Arte, Cultura y Turismo Casa del Campesino, creado inicialmente por el arquitecto.

La exposición puede visitarse hasta el 2 de agosto.