Fotografía de autor hoy: un estado de la cuestión

Canal de Isabel II expone la obra de jóvenes fotógrafos españoles

Madrid,
Elisa González Miralles. Sin título. Serie Wannabe, 2015-2016
Elisa González Miralles. Sin título. Serie Wannabe, 2015-2016

Mostrar en una única exposición un panorama general y absoluto de la reciente fotografía de autor en nuestro país sería pretencioso y quizá imposible, así que Jesús Micó, comisario de “Un cierto panorama, reciente fotografía de autor en España”, ha optado por proponer, en la Sala Canal de Isabel II, un acercamiento a la producción de medio centenar de artistas, algunos bien conocidos y otros mucho menos. De seis de ellos podemos ver series de imágenes colgadas en las tres plantas superiores de este espacio (se trata de Bego Antón, Elisa González, Teo Barba, Jon Cazenave, Bernardita Morello y Jesús Monterde); al resto nos los presenta Micó a través de algunos fotolibros y en dos democráticas proyecciones de obras en la planta baja y en la superior -decimos democráticas porque a la obra de cada uno de los cuarenta y ocho fotógrafos restantes se les dedica el mismo tiempo y porque su orden de aparición es alfabético-.

Este planteamiento obedece a la citada voluntad de no plantear una exposición enciclopédica y probablemente aun así incompleta, pero también al deseo de Micó de remarcar que tanto el fotolibro como los audiovisuales son formatos vertebrales en la actual fotografía de autor frente a la desarrollada por las generaciones anteriores. La causa es clara, la democratización de las tecnologías audiovisuales y las técnicas de impresión, y las consecuencias también: su obra puede así viajar con más facilidad, física o virtualmente.

El comisario ha explicado hoy que, dada su trayectoria como curador centrado en el arte emergente y como docente, ha buscado aunar en esta exhibición atractivo visual y rigor académico, y también que, como quizá ya habéis sospechado, en este caso el catálogo de la exposición no se ha concebido como mero acompañamiento sino como parte nuclear de esta propuesta, porque en esta publicación sí podemos adentrarnos, con cierta profundidad, en las imágenes de los 54 fotógrafos escogidos y en sus porqués.

A la hora de seleccionarlos no se ha buscado subrayar afinidades temáticas, formales o estéticas, sino más bien todo lo contrario: poner de relieve la diversidad de sus lenguajes e intereses, al margen de que sí podamos extraer de sus trabajos una nota común: su raigambre clara en el tiempo hiperconectado en el que estos artistas viven. De ahí que sea frecuente un cierto internacionalismo en los temas y también la constitución de colectivos destinados a favorecer una mejor edición y difusión de los proyectos.

Tanto el fotolibro como los audiovisuales son formatos vertebrales en la actual fotografía de autor frente a la desarrollada por las generaciones anteriores

Bego Antón. Sin título. Serie Everybody loves to cha-cha-cha, 2015
Bego Antón. Sin título. Serie Everybody loves to cha-cha-cha, 2015

Las fotografías expuestas, y también las proyectadas, se estructuran en series, para que el público pueda tener una mejor idea del alcance narrativo y estético de los autores. Son todos los que están pero no están todos lo que son; Micó ha dejado a un lado, en esta ocasión, a artistas con los que ha trabajado con anterioridad y que han ganado últimamente reconocimiento (Ricardo Cases, Cristina de Middel, Alejandro Marote, Lola Guerrera, Aleix Plademunt, Carlos Irijalba y un largo etcétera). El comisario ha afirmado de todos ellos, los presentes y los implícitos, que nunca una generación de fotógrafos españoles, o aquí radicados, había tenido tanta proyección internacional.

Como ya decíamos, en este caso consultar el catálogo no es que sea oportuno, es inevitable, y dada la visión horizontal de este proyecto no subrayaremos, entre los 54 nombres, unos sobre otros. Pero sí vamos a referirnos a los seis que exponen sus fotografías como tales en la Sala Canal.

De Bego Antón se exhibe Everybody Loves To Cha-cha-cha, un documento fotográfico y videográfico centrado en mujeres estadounidenses que bailan con sus perros siguiendo estudiadas coreografías. Suena a asunto banal, pero lo cierto es que la comunicación entre estas parejas de baile llega a ser muy estrecha, hasta al punto de alcanzarse en el asunto cierta profesionalización. Esta autora de origen bilbaíno retrata a menudo a colectivos con actitudes o costumbres inusuales a las que se entregan con verdadera fe.

El madrileño Teo Barba presenta “REAL”, su visión subjetiva -aunque pueda parecer engañosamente fría – de estampas de los Reales Sitios. Ha elegido instantes, detalles, que posibilitan el extrañamiento y el juego visual y que son fruto evidente de la observación lenta y el estudio compositivo.

Teo Barba. Sin título. Serie Real, 2013-2016
Teo Barba. Sin título. Serie Real, 2013-2016

 

Bernardita Morello. Sin título. Del libro Eden, 2016
Bernardita Morello. Sin título. Del libro Eden, 2016

Cazenave, por su parte, trabaja en blanco y negro en imágenes que destacan por su intensidad emocional, emanada de la exploración de mundos exteriores: estas fotografías son un intento de atrapar el mundo y a sí mismo. La serie que expone en Canal se titula Galerna y constituye un imaginario vasco personal; en sus palabras, una antropología íntima del sentir vasco. Se ha fijado sobre todo en escenarios naturales y vacíos que hacen propensa la reflexión sobre lo esencial.

Tremendamente impactante resulta Wannabe, la serie de Elisa González Miralles dedicada a las hiperrealistas muñecas sexuales japonesas, creadas, en todos sus detalles corporales, al gusto del consumidor. Representan, en el proyecto de esta fotógrafa madrileña, un ideal estético aspiracional para bastantes mujeres del país y una piedra de toque para indagar en la cosificación generalizada del cuerpo femenino.

Monterde, de vocación tardía pero está claro que intensa, reivindica la autenticidad y dignidad del ámbito rural en la serie Nemini Parco. Nacido en Benassal y criado en ese entorno, busca en su obra dar forma a una mirada nueva, respecto a esos paisajes pero también respecto a su propia biografía. Hay algo en estos trabajos de vanitas, de pensamiento sobre el origen y el destino: representan de dónde venimos y, quizá, hacia dónde vamos.

Por último, la argentina residente en Madrid Bernardita Morello muestra en la Sala Canal Edén, imágenes de un mundo exuberante realizadas desde la intuición y la búsqueda sensorial. Apuesta Morello por el hallazgo de belleza y placer en los rincones y momentos insospechados, no en los lugares o instantes estandarizados donde las tecnologías o la sociedad nos quieren inclinar a encontrarlos.

 

María Moldes. Sin Título. Serie Bloop, 2015
María Moldes. Sin Título. Serie Bloop, 2015
Michele Tagliaferri. El inconsciente. Serie Copying Claudia, 2012/2017
Michele Tagliaferri. El inconsciente. Serie Copying Claudia, 2012/2017

 

“Un cierto panorama, reciente fotografía de autor en España”

SALA CANAL DE ISABEL II

C/ Santa Engracia, 125

28003 Madrid

Del 12 de mayo al 23 de julio de 2017

 

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