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Lovaina celebra los 500 años de Utopía

Utopía, de Tomás Moro. Exposición Utopía, M Museum, Lovaina
Utopía, de Tomás Moro. Exposición Utopía, M Museum, Lovaina

 

¿Pensando en un destino para el punte de diciembre? Tenemos uno perfecto en el que no faltarán visitas a exposiciones, paseos en bicicleta ni un original plan gastronómico de lo más artístico. Y todo ello envuelto en un bellísimo marco arquitectónico. ¡Nos vamos a Lovaina!

Llegar a Lovaina es muy sencillo si volamos a Bruselas, hasta donde es fácil encontrar vuelos económicos casi todo el año. Desde el aeropuerto se accede cómodamente al andén del tren que nos conducirá hasta nuestro destino, del que tan solo nos separa una estación de ferrocarril. Lovaina tiene unas dimensiones perfectas para recorrerla a pie, aunque la opción de alquilar una bicicleta es muy recomendable; y si optáis por este medio de transporte, os animamos a informaros de cómo realizar la ruta de las abadías, que abarca principalmente la visita a cuatro de ellas, siendo la del conjunto de la Abadía del Parque una de las más impresionantes. La bicicleta nos permite además movernos rápidamente hasta otras zonas como el Campus Tecnológico de Arenberg, donde ver la biblioteca realizada por Moneo, o visitar el Beaterio, un lugar en el que nos trasladamos a otra época, la de su fundación en 1205, y en el que tienes ganas de ser un estudiante de nuevo. Un pequeño pueblo dentro de la ciudad, que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1998.

 

Gran Beaterio, Lovaina
Gran Beaterio, Lovaina

 

Otra de las razones por las que hemos escogido Lovaina como destino para estos días es la celebración del 500º Aniversario de la primera impresión de Utopía, de Tomás Moro, que tuvo lugar en 1516, en el taller de Dirk Martens. Por este motivo, el M Museum ha organizado una extensa exposición que nosotros ya hemos tenido ocasión de visitar y que es verdaderamente recomendable. Pero antes de entrar de lleno en lo que esta muestra nos ofrece, creemos que es una buena idea pasarse primero por “Utopia & More”, una exposición que sobre la famosa obra de Moro ha organizado la Biblioteca Universitaria. Este paso previo, además de permitirnos acceder a este edificio simbólico en Lovaina, es perfecto para aprender sobre esta obra universal, así como sobre la figura de Moro. Utopía analiza con detalle cómo era la sociedad de la época, corrompida por la codicia y la envidia, y propone una alternativa utópica: una isla inalcanzable “más allá del horizonte”, que incita a embarcarse en busca de algo mejor…

Plaza de la Biblioteca Universitaria. Edificio y escultura de Jan Fabre. Lovaina
Plaza de la Biblioteca Universitaria. Edificio y escultura de Jan Fabre.

 

Independientemente de la exposición, el edificio de la Biblioteca de la Universidad (Mgr. Ladeuzeplein, 21) no puede faltar en cualquier visita a esta ciudad, universitaria por excelencia. Fue destruido durante la Segunda Guerra Mundial y con él ardieron 900 000 libros. Tras la contienda fue reconstruido piedra a piedra y su sala de lectura es de gran belleza. Si el día está despejado merece la pena subir a la torre, en la que destaca su carillón de 63 campanas, a disfrutar de las vistas. Abajo, justo frente a ella encontramos una escultura regalo de Jan Fabre con un gran escarbajo pinchado en una enorme aguja de acero de 23 metros de altura. Un gran contraste de estilos que puede dar lugar a una buena conversación tomando algo en el café Commerce, desde donde se tiene una estupenda panorámica de la plaza.

 

Jan Gossaert, Princesa con esfera armilar (Princess Dorothea of Denmark), c.1530. Londres, National Gallery.
Jan Gossaert, Princesa con esfera armilar (Princess Dorothea of Denmark), c.1530. Londres, National Gallery.

Volvamos al M Museum para adentrarnos en la gran “En busca de la Utopia”, que permanecerá abierta al público hasta el 17 de enero de 2017. La muestra reúne una selección de 80 obras maestras, procedentes de colecciones públicas y privadas de todo el mundo, y en ella están representados todos los grandes artistas Primitivos flamencos de finales del siglo XV y principios del XVI, con joyas como El Retrato de un humanista, de Quentin Massys, del Städel Musuem de Frankfurt; su Retrato de Erasmo, en la colección privada de la reina Isabel II de Inglaterra, o la Princesa con esfera armilar, de Jan Gossaert Mabusem que normalmente se exhibe en la National Gallery de Londres. Junto a estas, obras de Hans Holbein, Durero, Patinir, Simon Bening o Conrad Meit completan esa visión de los Primitivos Flamencos, que es uno de los pilares de la muestra.

Como curiosidades, destacan los tres Belloteen Hofjes o pequeños retablos con decoración de jardines en relieve procedentes de Malinas, unas obras muy llamativas por su elaboración y únicas por su originalidad. También un conjunto de instrumentos científicos, y es que en el siglo XVI Lovaina era mundialmente conocida por la fabricación de artilugios como las esferas armilares, los astrolabios y los globos celestes, de los que aquí encontramos verdaderas maravillas, cuyo valor es técnico y científico, pero también revelador de la rica etapa histórica de la ciudad en aquel momento. También la selección de tapices desplegados estarían en esta sección de singularidades dentro de la muestra, entre los que destacamos uno inspirado en el Jardín de las Delicias del Bosco, tejido en Bruselas y habitualmente en El Escorial.

Tapiz inspirado en El Jardín de las Delicias del Bosco, procedente del Escorial
Tapiz inspirado en El Jardín de las Delicias del Bosco, procedente del Escorial.
Exposición Utopía, M Museum, Lovaina. Al fondo dos retablos ajardinados de Malinas.
Exposición Utopía, M Museum, Lovaina. Al fondo dos retablos ajardinados de Malinas.
Mappa Mundi, Dieppe, 1550. Londres, British Library. © Pierre Desceliers
Mappa Mundi. Dieppe, 1550. Procedente de la British Library de Londres. © Pierre Desceliers
Globos celestes en Utopía. M Museum, Lovaina.
Globos celestes en una de las secciones de “En busca de la Utopía”.

A lo largo de todo el recorrido por la exposición, que está dividida en cuatro grandes apartados temáticos: La obra Utopía de Tomás Moro (1516) -Un librito de oro publicado en Leuven que conquistó el mundo entero; Más allá de la Utopía. Imágenes del Paraíso y del Infierno; Más allá del horizonte. La imaginación de lo desconocido y El universo en la palma de la mano – Sueños del espacio y del tiempo; hay una constante que no abandona nunca al visitante y es la noción de humanismo, el poder de lo intelectual y las ganas de buscar siempre más allá, incluso en esos paraísos perdidos donde reina el caos, en la llamada distopía. Ni las inseguridades políticas, sociales o religiosas de la época apagaron el deseo de superación, de avance, de aspirar a comprender y medir el universo y la eternidad. La precisión científica, la información astronómica y el traspasar fronteras, unido al deseo de innovar, vencieron a los miedos y eso tuvo su reflejo en el arte y en toda una serie de signos que se han perpetuado en una sociedad que valora profundamente su legado cultural.

Al margen de este museo y de las dos exposiciones señaladas, toda Lovaina se ha volcado en la celebración de Utopía, e incluso algunos restaurantes han preparados platos inspirados en la obra literaria o, mejor dicho, en la cocina que se hacía en la época en la que se escribió; y en concreto en uno de los primeros volúmenes de recetas ilustradas del momento A notabel boecxken van cokeryen, de 1514. En nuestra visita a la ciudad pudimos disfrutar de las preparaciones del chef del restaurante Trente (Muntstraat, 36), absolutamente originales y deliciosas, aunque son varios locales los que se han sumado a esta iniciativa.

 

Ayuntamiento de Lovaina. Foto Marco Mertens
Ayuntamiento de Lovaina. Foto Marco Mertens

Otro de los emblemas de esta ciudad es su Ayuntamiento, símbolo de la resistencia nazi y sufridor de la ira alemana. Aunque está muy restaurado, sigue resultando impresionante y, en su conjunto, toda la plaza, la Grote Markt, es excepcional. La construcción del Ayuntamiento se inició en 1439, en estilo gótico brabantino, y duró 30 años. Las 236 esculturas que adornan sus tres pisos no se colocaron hasta 1850 y entre los personajes representados encontramos a artistas, eruditos y personajes famosos, en la planta baja; los santos patrones de las distintas parroquias de la ciudad, en el primer piso; los condes de Lovaina y los duques de Brabante en la siguiente. En las mensulas de piedra bajo las estatuas, principalmente encontramos escenas de la biblia sobre el pecado y el castigo. El edificio ha sufrido deterioros y reconstrucciones, la última en 1983 para restaurar los daños ocasionados por una bomba caída en 1944, durante la Segunda Guerra Mundial.

Merece la pena una contemplación pausada de cada una de las fachadas que conforman la plaza y para quienes la cuestión económica no suponga un problema, pueden considerar la posibilidad de alojarse en el hotel que acaba de abrir justo a su lado, el The Fourth/Tafelrond.

Y una visita que cualquier amante del chocolate debería incluir en su guía es a una pequeña chocolatería justo a la vuelta llamada Bittersweet, realmente espectacular por su originalidad y deliciosos sabores. Nos volvimos a Madrid con dos cajas y nos arrepentimos de no haber comprado más…

Otras calles que salen desde la Grote Markt invitan a caminar por el centro de la ciudad, algunas de ellas llenas de pequeños comercios especializados, como Mechelsestraat, donde encontramos una fantástica librería llamada Gobelijn y una irresistible tienda de quesos, Kaasmeester Elsen; curiosas tiendas de diseño, como Animaux Speciaux, floristerías como Mirte o algún concept store como Thelma Coffee & Design, por citar solo algunos de los que más nos gustaron.

Finalizamos este recorrido en otro de los centros neurálgicos de la ciudad y donde desembocan varias de esas céntricas calles: la Oude Markt, también conocida coloquialmente como “la barra de bar más larga del mundo” por la cantidad de bares que contiene. En este marco, escenario de festivales y punto de encuentro de amigos y estudiantes, nos despedimos, como no podía ser de otra forma, disfrutando de una buena cerveza, otro de los grandes tesoros de Lovaina.

 

Oude Markt o la barra más larga del mundo..., Lovaina
Vista de uno de los extremos de la Oude Markt o la barra más larga del mundo…, Lovaina.

 

 

MÁS INFORMACIÓN:

visitleuven.be/en

www.utopialeuven.be/en

www.visitflanders.com

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