Maneras de mirar el paisaje y la línea

El CAB de Burgos expone a Elvira Amor, Ernesto Cánovas, Félix de la Concha, María Jesús G. Garcés y Marceliano Santa María

Burgos,

Sus pinturas abstractas se basan en la imbricación entre formas y color, quedando las primeras a menudo inacabadas y sugiriéndose que podrían continuar más allá de los límites del lienzo hasta devenir objetos. Los segundos, los colores, los elige cuidadosamente, hasta el punto de que la relación entre unos y otros forma parte de su ya reconocible vocabulario personal. Elvira Amor es una de las artistas que, desde este mes de junio, estrena temporada expositiva en el CAB burgalés, adonde ha llevado obras marcadas por una gestualidad que tiene mucho de expresión corporal: sus personales formas curvas contrastan con las rectas que delimitan las telas y que parecen no poder encerrar a aquellas, con vocación expansiva.

Su muestra lleva por título “Verde llano, rosa oblicuo” y ha nacido, según ha explicado la madrileña, de la comprensión del espacio expositivo como un todo cuyos suelos y paredes habían de recorrer sus piezas: los muros han quedado coloreados y reinterpretados con serigrafías y elementos intervenidos en la propia sala que modifican nuestras nociones de edición, de obra seriada, de múltiple… para transmutarse en una instalación que seguramente no pueda repetirse.

Consta esta propuesta de lienzos, trabajos en papel o bastidores que integran, en último término, un mural del que parecen haberse desprendido varias formas orgánicas desplazadas al centro de la estancia, a modo de elementos exentos que cobran autonomía escultórica y favorecen una percepción de atmósfera indivisa e híbrida a la par. Los tonos de unos y otros trabajos transmiten luz y un leve dinamismo que no altera la calma fundamental del conjunto, no ligada a patrones ni cánones: en la producción de Amor lo imprevisto deriva de la vibración que el trazo manual genera y de su irregularidad (previsible) y los tonos van más allá de las telas para teñir el aire, generando sensaciones inmersivas.

Elvira Amor. "Verde llano, rosa oblicuo". CAB de Burgos
Elvira Amor. “Verde llano, rosa oblicuo”. CAB de Burgos
Elvira Amor. "Verde llano, rosa oblicuo". CAB de Burgos
Elvira Amor. “Verde llano, rosa oblicuo”. CAB de Burgos

Félix de la Concha, por su parte, recala en el CAB tras exponer en la Galería Fernández-Braso sus visiones de Torres Blancas y sus alrededores. El proyecto que presenta en “Restos de un naufragio” es americano: muestra paisajes urbanos y de las periferias de las ciudades que habitó en Estados Unidos, conformando secuencias y polípticos, como La regla del 25, una granja en Prairie du Chien Road (por la mañana, al mediodía y por tarde), que consta de setenta y cinco pinturas en las que captó otros tantos instantes temporales de esa misma construcción desde distancias diversas.

En los conjuntos North Square Park Panorama, Panorama en Lyme y Dos casas, dos vistas, plantea además este artista la incompatibilidad entre las reglas perspectívicas de base matemática y la representación fiel de un paisaje extendido. Así, lo aparentemente abocado a la repetición por el empleo de un criterio análogo cambia de sentido al mostrar que siempre hay formas diversas de captar un objeto desde el mismo punto de vista. Por último, los desafíos de la representación estrábica los rastrea en Penn Avenue, que realizó en dos direcciones, con sus manos contrapuestas, y que aquí se exhibe como si se tratara de un caleidoscopio; así nos exige De la Concha considerar que la plasmación naturalista no puede basarse solo en la contemplación.

Félix de la Concha. "Restos de un naufragio". CAB de Burgos
Félix de la Concha. “Restos de un naufragio”. CAB de Burgos
Félix de la Concha. "Restos de un naufragio". CAB de Burgos
Félix de la Concha. “Restos de un naufragio”. CAB de Burgos

Y no solo a partir de lo presente, sino también de las ausencias, estructura su exposición María Jesús G. Garcés. En “Al final siempre son flores”, esta autora sevillana nos enseña arcillas blancas planteadas como extensiones de un único fragmento y papeles en los que la pintura es derramada sin definición, obras elaboradas con materiales y técnicas humildes en las que se esquiva deliberadamente lo perfecto para conceder belleza al deterioro.

Trabaja Garcés con elementos simples, esquemáticos y cercanos que evocan lo conocido: flores, bodegones y espacios por los que, en algunos casos, transitaron autores referenciales para la andaluza, como Fra Angélico, Zurbarán, Giorgio Griffa, Silvia Bächli, Sonia Delaunay, Agnes Martin o Richard Tuttle, pero sobre todo la escuela Mono-Ha, el movimiento japonés que propuso nuevos modos de relacionar materia y realidad, objetos y naturaleza… Además, asoman en estas piezas las formas musicales clásicas indias, las ragas, en las que los rasgos melódicos enfatizan determinadas notas, alargándolas.

Mª Jesús G. Garcés. "Al final siempre son flores". CAB de Burgos
Mª Jesús G. Garcés. “Al final siempre son flores”. CAB de Burgos

“Hallazgos arqueológicos no autorizados” es la propuesta en el CAB de Ernesto Cánovas y Gracjana Rejmer-Cánovas, y también bebe de la cultura nipona, su tradición sofisticada y su reverso kitsch. Su objetivo ha sido analizar los lazos entre lo aparente y lo sugerido, lo únicamente posible y lo que se puede constatar.

Veremos artefactos retrofuturistas que contienen referencias a la historia, el cine y la cultura popular y que diluyen las fronteras y las jerarquías entre original y copia; también entre las distintas técnicas creativas, que se funden en estos proyectos. Han partido de imágenes que manipularon digitalmente y descontextualizaron en procesos de reducción, ampliación y recorte, transfiriendo el resultado sobre aluminio.

Ernesto Cánovas. "Hallazgos arqueológicos no autorizados". CAB de Burgos
Ernesto Cánovas. “Hallazgos arqueológicos no autorizados”. CAB de Burgos

De regreso al paisaje nos lleva la exhibición que dedica el CAB a Marceliano Santa María, pintor burgalés bien conocido en su ciudad. Su recorrido ha querido alejarse de su trayectoria más celebrada y cobija numerosas piezas inéditas y algunos bocetos: obras a veces audaces y enérgicas, otras centradas en el dibujo, entre las que no faltan primeros planos (¡Frío!, Pinar, Sauces viejos, Terra Mater); representaciones de la luz castellana (El sendero, Nieve en Jadraque); estampas cotidianas (Caldereta en la yunta) o un Cristo crucificado de 1890 dominado por una iluminación crepuscular de valor simbólico.

Marceliano Santa María. "Inéditos y curiosos". CAB de Burgos
Marceliano Santa María. “Inéditos y curiosos”. CAB de Burgos

 

Félix de la Concha. “Restos de un naufragio”

Ernesto Cánovas. “Hallazgos arqueológicos no autorizados”

María Jesús G. Garcés. “Al final siempre son flores”

Elvira Amor. “Verde llano, rosa oblicuo”

Del 3 de junio al 25 de septiembre de 2022

 

Marceliano Santa María. “Inéditos y curiosos”

Del 9 de junio al 28 de agosto de 2022

 

CAB. CENTRO DE ARTE CAJA DE BURGOS

c/ Saldaña, s/n

Burgos

 

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