Dos museos para Yves Saint Laurent

En octubre abren centros dedicados al modisto en París y Marrakech

París,

En 2011, con motivo de la presentación en la Fundación MAPFRE de la primera muestra antológica dedicada a los diseños de Yves Saint Laurent en España, contaba Pierre Bergé, su socio y pareja, recientemente fallecido, que consideraba al modisto un artista pero que no entendía sus creaciones como arte, porque la moda tiene sus limitaciones. Yves Saint Laurent las conocía y, según Bergé, fueron para él la causa de profundas depresiones. Lo atisbamos en algunas de sus declaraciones, que habitualmente eran muy sinceras: Quiero que todos sepan el respeto que merece este oficio, que no consiste tanto en hacer arte, cuanto en la necesidad que tiene un artista de existir.

A partir de este mes de octubre, las creaciones –arte o no– del creador Saint Laurent podrán verse en las dos ciudades fundamentales de su vida: París y Marrakech. El día 3 abre sus puertas en el número 5 de la Avenida Marceau, una mansión de la época del Segundo Imperio donde el modisto y sus equipos trabajaron tres décadas, el que será el Musée Yves Saint Laurent. Entre 2004 y 2016, este espacio ha sido la sede de la Fundación que compartía con Bergé, donde se han programado una veintena de muestras dedicadas a subrayar los vínculos entre la moda y la creación plástica, pero a partir de este otoño los 450 metros cuadrados de superficie expositiva con que cuenta este lugar se destinarán por completo a mostrar las creaciones del diseñador. La transición de las salas de fundación a museo ha corrido a cargo de la escenógrafa Nathalie Crinière y el diseñador de interiores Jacques Grange.

Musée Yves Saint Laurent.© Luc Castel
Musée Yves Saint Laurent.© Luc Castel

El nuevo centro se estructura en diversos ambientes y nos enseñará, según divisiones temáticas, la producción de Saint Laurent, el creador introspectivo que introdujo juventud y libertad en el vestuario de la alta sociedad de su tiempo, y a la larga en el de todos (dicen que uno de sus lemas fue Abajo el Ritz, arriba la calle).

El acceso al centro se realizará por la que fue la entrada histórica de la casa de modas, destinada en su momento a los clientes e invitados considerados de mayor categoría social. Ya en el interior, podremos visitar los salones de alta costura de la antigua tienda, dónde se recibía a los clientes y donde se analiza la biografía de Saint Laurent a partir de una serie de retratos y de un vídeo didáctico; y a continuación veremos algunas de las prendas más significativas del estilo al que Saint Laurent dio nombre, como el esmoquin, la sahariana, el mono o el chaquetón marinero. Revolucionarios en su momento, y aún hoy en ciertos contextos, estas prendas derribaron fronteras entre los armarios masculino y femenino, con una vocación lúdica pero fundamentalmente reivindicativa: aportaron a las mujeres que los vestían, y basta con ver las fotos de entonces, seguridad, poder y emancipación individual.

El siguiente ambiente del Musée Saint Laurent se dedicará a la evolución de su colección. En este apartado, un amplio espacio se ha reservado para la presentación de una única colección en conjunto: será una cada año. Para el primero del museo, se ha elegido la primera de Yves Saint Laurent, la correspondiente a la primavera-verano 1962. La ropa se acompaña de documentos (bosquejos, tablas de colección, fotografías, fichas de taller o revistas), que nos permitirán adentrarnos mejor en sus procesos.

El Musée pretende deleitar a los amantes de Saint Laurent con un gabinete de curiosidades donde contemplar las incursiones del diseñador en las artes gráficas y sus bocetos. Se exhibirán aquí dibujos de juventud, tarjetas de felicitación, bosquejo de trajes y de decorados de teatro dónde descubrir la cara más desconocida del artista: la de dibujante. Junto a ellos, pendientes, sortijas, collares, broches, pulseras o cinturones demostrarán la importancia que concedió a la joyería.

No podía faltar en el centro una sección para los vestidos de novia, casi cerrando el recorrido por el museo como las modelos con traje blanco concluyen habitualmente los desfiles en la pasarela. Antecede a un estudio mental, un apartado dedicado a las figuras que inspiraban a Saint Laurent, la mayoría ajenas al campo de la moda, como Luis Jouvet, Marcel Proust, Jean Cocteau, Richard Wagner, Matisse, Piet Mondrian, Picasso o Vincent Van Gogh.

Por su parte, el museo de Marrakech cuenta con una superficie total de 4000 metros cuadrados y se encuentra en la calle de la ciudad que lleva su nombre, próximo al Jardin Majorelle, que Saint Laurent y Pierre Bergé salvaron de la destrucción en 1980.

Se ha ocupado de su diseño el Studio KO, e incluirá un espacio para exposiciones permanentes y temporales de la obra de Saint Laurent, un auditorio, una biblioteca de investigación y un restaurante.

Museo Yves Saint Laurent en Marrakech
Museo Yves Saint Laurent en Marrakech

 

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