Beatriz Milhazes reside y trabaja en Río de Janeiro y se abrió paso dentro de la escena artística brasileña a mediados de la década de los ochenta. Desde entonces sus composiciones, que reúnen influencias del Barroco colonial, el Modernismo y el arte popular de su país, se han mostrado en numerosas galerías y museos internacionales, incluyendo la Fundación Cartier de París, el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (en el año 2000), y la Galería Elba Benítez, en 2001. Ha participado así mismo en las Bienales de Sao Paulo y Venecia. Sus trabajos se caracterizan por la superposición de llamativos motivos ornamentales que buscan ejercer sobre el espectador efectos próximos a los del hipnotismo o encantamiento.