Simon Edmondson, en intimidad velazqueña

Álvaro Alcázar muestra el proyecto más ambicioso del artista inglés

Madrid,

La Galería madrileña Álvaro Alcázar cerró el año pasado abriendo nueva etapa: se trasladó a Diego de León, estrenando sede en la calle Ferrer del Río, 5 y también inauguró una programación expositiva que desde entonces ha estado estructurada en presentaciones simultáneas de muestras individuales, más extensas; exhibiciones colectivas de los artistas representados y obras singulares a las que se concede protagonismo en Una pared.

En su último ciclo, la colectiva viene protagonizada por el color negro y de ella forman parte piezas de Eduardo Arroyo, Rafael Canogar, Toshio Matsui, Guillem Nadal, Nigel Hall, Philippe Barde, David Nash, Jaime Castillo y Kepa Garraza; en Una pared, la sala nos enseña un trabajo de Antonio Murado y la individual, “Sprezzatura”, acoge uno de los proyectos más amplios desarrollados hasta ahora por el británico Simon Edmondson.

Vista de la exposición "Sprezzatura", de Simon Edmondson, en la Galería Álvaro Alcázar
Vista de la exposición “Sprezzatura”, de Simon Edmondson, en la Galería Álvaro Alcázar

Nos centraremos en esta última muestra, con la que la sala ha querido rendir homenaje al recientemente fallecido Calvo Serraller: consta de dibujos sobre papel y pinturas, en diferentes escalas, con las que este artista ha buscado acercarse a la vertiente más íntima y emocional de la obra de Velázquez. Ha replanteado Las Meninas buscando reivindicar la densidad expresiva del retrato, a veces sepultada bajo (igualmente densas) especulaciones teóricas sobre sus espacios y lo ha hecho tras estudiar muy a fondo las técnicas y materiales con los que Velázquez trabajó a mediados del siglo XVII, empapándose de documentación histórica y acercándose al genio con devoción y rigor.

Evidentemente, no ha buscado copiar, ni solo ponerse de rodillas ante “el pintor de los pintores”, sino llamar nuestra atención sobre la que considera esencia de Las Meninas, al margen de su virtuosismo técnico y sus conceptos esenciales: el retrato de las existencia humana de los presentes en esta imagen de grupo en la que el mismo Velázquez se incorporó reclamando, no tanto su propia relevancia, como la de los artistas que dan fe de lo visto sin dejar de lado las particularidades de su mirada personal.

Vista de la exposición "Sprezzatura", de Simon Edmondson, en la Galería Álvaro Alcázar
Vista de la exposición “Sprezzatura”, de Simon Edmondson, en la Galería Álvaro Alcázar

A cuatro lienzos que comparten dimensiones exactas con Las Meninas los acompañan otros realizados bajo la inspiración del maestro, sus técnicas, su tratamiento de la luz, de la perspectiva y de esos retratos grupales; hay que recordar que sprezzatura era el término con el que los teóricos del arte clásico se referían a la soltura y la libertad con el que los mejores pintores abordaban las escenas más difíciles. Lo empleaba Castiglione en El cortesano para referirse a la cualidad de los príncipes que sabían valerse en sociedad sin afectación, pensando en algunos miembros de los Médici y los Gonzaga, pero ya Vasari en el contexto manierista utilizó la palabra para referirse a la negligencia intencional y creativa de los artistas, vinculándola a la indefinible gracia que no puede lograrse con premeditación.

Para Edmondson quienes hoy continúan valiéndose de la pintura como medio expresivo han de aprovechar su libertad para volcar sus energías, nuevas y propias, en los lienzos, plasmando en ellos reinterpretaciones del mundo que no dejen de ser representaciones de humanidad, la base de su diálogo aquí con Velázquez.

Ha pretendido, en sus palabras, partir del pasado para mirar hacia adelante, dar un paso lateral al imparable progreso de las cosas, y rebobino hasta el momento de las inmediaciones del arte moderno, el mundo de Degas o Manet, en plena búsqueda de la protomodernidad. Un momento en que la importancia de Velázquez y Goya sobresalía de manera sensacional. De esta manera, quiero emprender una variación del camino tradicional de la vanguardia y producir una serie de obras con la intención de redescubrir niveles, convenciones y técnicas perdidas y aplicarlas a mi pintura de hoy. Así, quizás podría reinstalar la pintura con una nueva vitalidad.

Esta idea empezaba a tomar forma en 2007 y hoy sigo desarrollándola. Decidí poner estas ideas en marcha enfocándolo en Velázquez, autor de Las Meninas, que como pintor de los pintores es muy querido por el público en el mundo entero. Retratando la humanidad de manera asombrosa, Velázquez y su técnica suponen uno de los puntos más brillantes e importantes de toda la historia de la Cultura. En su obra encontramos ideas, decisiones y un proceso de selección que ha inspirado un sinfín de interpretaciones a lo largo de su historia y hoy todavía. Personalmente, lo siento como algo muy cercano a mí, rompiendo clichés de su época y observando el mundo de su presente, de donde fluyen los protagonistas, sus personajes mitológicos que salen de las calles de Madrid, sus infantas humanas y sus enanos reales y orgullosos.

Simon Edmondson. Study nº4 (Sala de rezar), 2019
Simon Edmondson. Study nº4 (Sala de rezar), 2019

 

 

Simon Edmondson. “Sprezzatura”

GALERÍA ÁLVARO ALCÁZAR

c/ Ferrer del Río, 5

Madrid

Del 4 de abril al 1 de junio de 2019

 

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