Victoria Combalía
Lee Miller. Picasso y Lee Miller en el taller de Picasso, 1944
Museu Picasso, Barcelona
© Lee Miller Archives, Inglaterra 2007
Esta es una exposición llena de interés porque Lee Miller (amante ocasional de Picasso) fue una notable fotógrafa cuya obra no fue descubierta por el público hasta después de su muerte.
Nacida en los Estados Unidos en l907, hija de un gran aventurero (rasgo que ella heredó) fue violada a los siete años, lo que debió de marcarla profundamente en su vida. Compañera de Man Ray, “descubrió” junto a él el rayograma, en un accidente en el laboratorio, al encender súbitamente la luz cuando un animal trepó por su pierna. A principios de verano de l937 Lee conoce a Roland Penrose y empieza una relación con él: su estancia en el plácido verano en Mougins, en la Costa Azul, con Picasso y Dora Maar, Man Ray y Ady Fidelin es reflejada en una bella serie de fotografías presentes en la exposición. Destacan de toda esta serie los retratos de Picasso, vestido con una camisa a topos idéntica a la de su amante Dora Maar.
Sobresalen de manera especial en esta muestra los soberbios retratos que Picasso hizo de Lee Miller, en su mayoría vestida de arlesiana, y mostrando siempre (pues a Picasso no se le escapaba ningún rasgo anatómico) sus dientes separados y unos ojos de perfil que asemejan a delicados pajaritos cuyos picos son las pestañas.
El grueso de la muestra son fotografías de Picasso y su entorno tomadas por Lee: el artista en su estudio, Françoise Gilot y sus hijos, visitas de famosos como las de Gary Cooper y divertidas escenas jugueteando con máscaras. De especial interés son también los documentos sobre el viaje que el marido de Lee, Roland Penrose, hizo a Catalunya en l936 para documentar los logros de la República con fines propagandísticos y para dejar constancia de la salvación del patrimonio artístico catalán en plena Guerra Civil.