Sandra Rilova

NOMBRE: Sandra

APELLIDOS: Rilova

LUGAR DE NACIMIENTO: Burgos

FECHA DE NACIMIENTO: 1988

PROFESIÓN: Ilustradora

Apenas os hemos hablado en esta sección de ilustradores, al margen de que algunos de nuestros fichados hayan hecho algunas incursiones en esta disciplina. Es hora de poner solución, así que estrenamos el verano repasando la obra de Sandra Rilova, que en este campo explora deseos y miedos, suyos o nuestros, difíciles de expresar con palabras. Nos traslada a escenarios que parecen soñados, pero que sugieren algo más que una apelación a la fantasía: zonas oscuras, recordatorios de que lo siniestro puede quedar a la vuelta a la esquina y de que también está presente en la mayoría de los relatos que nos marcan desde la infancia.

Si cada ilustrador tiene su librillo, esta autora burgalesa elige no trabajar basándose, desde la literalidad, en los textos, sino plantear su obra a partir de los huecos que las palabras dejan, yendo más allá de lo obvio para que el espectador cuente con márgenes de interpretación y pueda proyectar en las ilustraciones su propia mirada, sea cual sea su edad o su contexto cultural.

Rilova se licenció en Bellas Artes en la Universidad del País Vasco, ha realizado posgrados en dirección cinematográfica e ilustración infantil en la ESCAC y EINA, respectivamente, y desde 2013 ha presentado exposiciones individuales en el Museo de Arte Contemporáneo Ángel Miguel de Arce de Sasamón (Burgos), el Espacio Alexandra de Santander y la Universidad de Burgos; también ha participado en colectivas en Getxo Arte, la Galería Windsor Kulturgintza, la Galería Rafael Pérez Hernando de Madrid, el Museo de la Memoria Histórica de la Universidad mexicana de Puebla, la Feria del Libro de Guadalajara, también en México, o el Museu da Electricidade de Lisboa. Para completar su currículum, os contamos que su trabajo ha sido seleccionado en convocatorias como los World Illustration Awards 2017, ILUSTRARTE 2016, el Catálogo Iberoamericano de Ilustración 2015 o Latin American Ilustración 5, y que la representan Pencil Ilustradores y  Spinning Yarn.

Sandra, que se identifica más como ilustradora que como artista, nos ha contado que su familia la acercó a la creación desde niña, aunque fue hace cuatro años cuando comenzó a dedicarse de lleno a la ilustración: Más que artista, me gusta decir que soy ilustradora. Desde pequeña en casa he visto a mi madre dibujar y pintar, eso me ha acompañado siempre, y el apoyo de mi familia ha pesado mucho en las decisiones que he ido tomando en mi vida.

Mi formación comenzó en la facultad de Bellas Artes del País Vasco, en la que me especialicé en la rama de pintura. Durante un tiempo me dediqué por completo a ello, realizando exposiciones en diferentes ciudades como Madrid, Bilbao, Santander o México D.F. Poco después me mudé a Barcelona siguiendo mi pasión por el cine, algo en lo que no me formé en la facultad, y tenía una espinita clavada. Para ello realicé un máster en Dirección Artística Cinematográfica, pero tras un tiempo trabajando en varios proyectos me doy cuenta de que aquello no es lo mío, que echo de menos las pinturas, la soledad de uno mismo en su estudio… Después de pasar una mala racha, de encontrarme perdida y no saber qué hacer, aparece la ilustración en mi vida. Esto fue en el año 2014 y desde entonces no he parado de trabajar y de disfrutar trabajando.  Aunque me he movido en diferentes terrenos, siempre ha estado presente esa necesidad de expresarme a través de las imágenes.

Desde ese 2014, Sandra viene desarrollando tanto proyectos propios como obras por encargo. En ocasiones explora las posibilidades de la ilustración a la hora de narrar, otras veces pone su lápiz o su ratón al servicio de lo que no hay palabras para explicar: El trabajo que realizo me permite reflexionar sobre temas que realmente me preocupan y poder compartirlos con los demás. Trabajar a través de las imágenes es un arma muy potente, puedes llegar a emocionar a un público muy amplio, desde un adulto a un niño, y transmitir un mensaje.

Además de realizar trabajos para clientes, es importante dejar un hueco a los proyectos personales, es en este espacio en el que puedes poner sobre la mesa temas que te preocupan, tus miedos, tus deseos… Me fascina ese poder comunicador que pueden tener los libros – álbumes, en los que a través de una narración de imágenes puedes hablar de cualquier tema. Recientemente he desarrollado un proyecto, que ha sido finalista en el Silent Book Contest de Bolonia, en el que sólo se aceptaban libros sin palabras (Silent books). Para mí, este tipo de formatos es muy agradecido, ya que nunca me he sentido cómoda a la hora de expresarme con palabras, y en este caso hay que contar una historia solo con imágenes.

El proyecto que presenté se llama I am King, y en él intento hacer una reflexión sobre un tema que me parece terriblemente doloroso, los muros. Hablo sobre el conflicto entre dos pueblos, el miedo a lo diferente, la violencia…

Sus influencias son diversas y muchas tienen que ver con sus estudios en arte y cine: Mi formación en Bellas Artes ha sido muy enriquecedora en todos los aspectos. Estudiar pintura, los clásicos en la historia del arte, y llegar con este bagaje hasta realizar el trabajo que desarrollo ahora creo que ha sido una ventaja a mi favor. Además de eso, me ha influenciado mucho el cine, que es otra de mis pasiones. La literatura, los videojuegos… me encanta perderme en los mundos que han creado otros.

En una reciente entrevista para Pencil Ilustradores, explicaba Rilova que, aunque haya encontrado finalmente su camino en el papel  o en la ilustración digital, el universo del cine sigue presente en su obra; que, cuando trabaja, de algún modo se siente directora de su propia película y tiene en mente planos, personajes, gama cromática, localizaciones… Admira -decía- las atmósferas del gran Wes Anderson y nos recomendaba su peli más reciente, Isla de perros. Se trata de referencias que podemos rastrear en sus ilustraciones; no son difíciles de encontrar aunque nunca sean obvias.

En cuanto a técnicas, aunque escoja en cada caso las más adecuadas a cada proyecto, últimamente se decanta Sandra por las digitales: Trabajo en diferentes técnicas, tanto analógicas como digitales, aunque estas últimas son las que más utilizo en los últimos proyectos. Cada trabajo me pide una técnica y cada una ofrece unas cualidades, a veces puedo utilizar tintas, gouache, monotipia…

El trabajo en digital tiene muchas ventajas; por ejemplo, para proyectos con clientes da mucha rapidez: hacer cambios no supone repetir una ilustración. Actualmente estoy aprendiendo a dar vida a mis ilustraciones a través de la animación (gifs), y es algo que me encanta.

Hasta la fecha ha publicado dos trabajos, ambos deliciosos de verdad, en Ediciones Nevsky, firma a cargo de James y Marian Womack: Uno es La Reina de Picas de Alexandr Pushkin (2016), una obra fundamental de la literatura rusa con la que hice mis primeras andaduras a la hora de ilustrar. Sentía que tenía una gran responsabilidad a la hora de plasmar las imágenes, pero esta historia de avaricia y locura hizo brotar mi imaginación dando vida a sus personajes con pincel y tinta china.

El segundo proyecto que me gustaría destacar sería Piel de Asno (2017), cuento clásico de Charles Perrault reescrito por Sofía Rhei. En este caso me costó mucho encontrar el tono y el lenguaje gráfico que me sugería el texto. La fase de documentación me llevó más tiempo de lo normal; al final, gran parte de la inspiración la tomé de la pintura clásica italiana, de pintores como Paolo Uccello, entre otros.

El cuento original de Piel de Asno tiene un fondo oscuro, como tantos cuentos clásicos, por lo que me tomé la libertad de introducir algunos guiños que, aunque a los niños les pasarán desapercibidos, los adultos los podrán captar.

Para conocer mejor a Sandra y permanecer atentos a sus próximos proyectos, podemos pasar por su web: www.sandrarilova.com. También os sugerimos seguirla en Instagram y behance.

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