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Mario Guixeras

Mario GuixerasNOMBRE: Mario

APELLIDOS: Guixeras

LUGAR DE NACIMIENTO: Madrid

FECHA DE NACIMIENTO: 1994

PROFESIÓN: Comisario, gestor cultural y artista

 

A nuestro fichado esta semana habéis podido conocerlo como artista (con trabajos que tenían que ver con los binomios construcción-relación y viaje-deriva, y con un paisaje abordado más allá de sus enfoques románticos o desde lo puramente territorial, vinculándolo a las experiencias individuales y colectivas), pero también, y sobre todo en los últimos años, por su faceta como gestor cultural y comisario: Mario Guixeras viene participando en la presentación de proyectos en los que se enlaza naturaleza y cultura y se trabaja a partir del contexto y actualmente, desde 2021, es director del Museo de Arte Contemporáneo Florencio de la Fuente de Huete, en Cuenca.

Graduado en Bellas Artes por la Universidad Francisco de Vitoria y Máster en Humanidades en ese mismo centro, como artista ha participado en exposiciones colectivas en el propio Museo Florencio de la Fuente, la Galería Jorge Alcolea de Madrid, el Espacio de Dentro de Málaga, la Di-gallery sevillana o la Sala de Arte Joven de la Comunidad de Madrid, esta última bajo el título de “La casa como reflejo en un espejo”, resultante de la pasada edición de la convocatoria Se busca comisario, en la que fue premiada Henan Xin. Pudo verse entre febrero y mayo. Exhibió, asimismo, su producción en citas como JUSTMAD (2018 y 2021) y Affordable Art Fair (Estocolmo, 2016).

Su labor como comisario viene desarrollándola desde 2016 y se ha materializado en exhibiciones en el stand Emerge de su Universidad en JUSTMAD, la Galería Jorge Alcolea, la Sala El Águila (junto a Francisco Carpio), el museo que ahora dirige, el Centro Cultural Marcos Valcárcel de Ourense, el Ayuntamiento de Iznájar o el Centro de Arte Contemporáneo Rafael Botí (Córdoba).

Mario Guixeras. Cuaderno de campo: campo de juego (detalle). Sala de Arte Joven de la Comunidad de Madrid, 2023
Mario Guixeras. Cuaderno de campo: campo de juego (detalle). Sala de Arte Joven de la Comunidad de Madrid, 2023
Mario Guixeras. Cuaderno de campo: campo de juego (detalle). Sala de Arte Joven de la Comunidad de Madrid, 2023
Mario Guixeras. Cuaderno de campo: campo de juego (detalle). Sala de Arte Joven de la Comunidad de Madrid, 2023
Mario Guixeras. Cuaderno de campo: campo de juego (detalle). Sala de Arte Joven de la Comunidad de Madrid, 2023
Mario Guixeras. Cuaderno de campo: campo de juego (detalle). Sala de Arte Joven de la Comunidad de Madrid, 2023
Mario Guixeras. Cuaderno de campo: campo de juego (detalle). Sala de Arte Joven de la Comunidad de Madrid, 2023
Mario Guixeras. Cuaderno de campo: campo de juego (detalle). Sala de Arte Joven de la Comunidad de Madrid, 2023

Guixeras se incorpora a esta sección porque queremos conocer qué le llevó a compatibilizar su actividad creativa con la curatorial y qué posibilidades y retos viene encontrando a la hora de consolidar en el ámbito rural proyectos expositivos imbricados en ese contexto. El origen de esa inquietud, nos cuenta, tiene que ver con su atención primera a las relaciones entre su propia obra y los lugares donde la llevaba a cabo: Desde la Facultad (estudié Bellas Artes), en mi obra artística ya me preocupaba por intentar trabajar en estrecha relación con los espacios en que se desarrollaba. Esa inclinación fue evolucionando hacia un interés por el arte contextual que pronto derivó en un mayor desarrollo de investigaciones teóricas, las cuales me permitían no sólo ahondar en mi trabajo, sino explorar modos de entretejer referentes artísticos, filosóficos e históricos, generar sistemas de pensamiento relacional.

Durante una beca de formación docente que realicé en la Universidad Francisco de Vitoria de Madrid entre 2016 y 2018, empecé a colaborar con el comisario Francisco Carpio en algunos proyectos, que me permitieron tomar un primer contacto experiencial con la práctica curatorial. Desde entonces fue avivándose mi interés por el comisariado y la mediación cultural.

A Carpio muchos lo reconoceréis por sus habituales críticas en ABC Cultural; además, fue director del Centro de Documentación del CAAM de Las Palmas y director de exposiciones del Museo Esteban Vicente segoviano.

Mario Guixeras. Fragmentos de simultaneidad. Sala de Arte Joven de la Comunidad de Madrid, 2023
Mario Guixeras. Fragmentos de simultaneidad. Sala de Arte Joven de la Comunidad de Madrid, 2023

Le interesan a Mario, como dijimos, nuestros lazos con el entorno que habitamos, en lo íntimo y vital y en lo público; nuestro modo de tomar conciencia del paisaje que nos rodea, conectando para ello arte, cuerpo y lugar. También ha trabajado en torno a la noción de exposición como baluarte de los modelos de divulgación del arte actual en nuestros días.

En cuanto a sus inquietudes como artista, reflexiona sobre esa raigambre que nos une a los espacios frente al imperio de lo líquido: En una actualidad hiperactiva, superconectada y megaproproductiva, la sensación de deslocalización es muy frecuente. Desarrollar capacidades de interlocución no normativas (desde muy diversos lenguajes) con nuestros entornos cotidianos implica activar nuestra percepción poética y política del contexto, lo que posibilita reelaborar los modos en que consumimos los diferentes paisajes que nos afectan y a los que afectamos, reflexionando en torno al valor de las imágenes, sobre lo que entendemos por “habitar” un lugar, o sobre el desplazamiento como experiencia. A través de la intervención, la fotografía, el arte relacional, el dibujo, el vídeo o la escultura, las obras se conforman en gran medida en el exterior (un parque, un bar, el bus, la calle, el tren…), como experiencias y exploraciones que se preocupan por situaciones determinadas.

Como comisario, y en un ejercicio de coherencia, viene reflexionando sobre asuntos semejantes: Mis intereses como curador convergen con mis preocupaciones artísticas. La línea de trabajo que desarrollo se centra en la exploración del concepto de lo “habitable”, entendido como la capacidad que tenemos para “participar de” y “pertenecer a” nuestros contextos inmediatos, desde una perspectiva tanto poética como política. Esto se da a través de una noción del “paisaje” como agente significante y protagonista, alejada tanto de la percepción romántica del mismo como de su vinculación con lo estrictamente territorial. Se trata de tomar consciencia del paisaje como ecosistema del que participar a través de la activación de experiencias cotidianas.

Intento, así, elaborar y colaborar en proyectos que parten del binomio “naturaleza – cultura” y en los que la noción de lo espacial como contexto desde el que trabajar aparece como una característica esencial. Esto me ayuda a perseguir diálogos entre imagen – cuerpo – espacio, dentro de la temporalidad que definimos como “proyecto expositivo” y a darle vueltas a la propia identidad de “exposición” como formato dominante de la difusión del arte contemporáneo.

La línea de trabajo que desarrollo se centra en la exploración del concepto de lo “habitable”, entendido como la capacidad que tenemos para “participar de” y “pertenecer a” nuestros contextos inmediatos.

Los proyectos que Guixeras viene comisariando no pueden enmarcarse en disciplinas concretas y, como podéis imaginar, cada espacio concreto que los alberga adquiere relevancia. Potencia, asimismo, las relaciones entre las piezas, aunque pocas veces sean explícitas y puedan apuntar a ausencias, y trata de involucrarse en propuestas colaborativas: Creo que, independientemente del planteamiento original, como en todo, la formalización de cada proyecto acaba dependiendo de muchas variables, pero me gusta intentar que el espacio expositivo adquiera un papel importante, trabajar un comisariado pedagógico capaz de sincronizarse con la mediación y desarrollar proyectos colectivos, capaces de complejizar el sentido relacional de la exposición, de atender a las tensiones, encuentros y huecos que se dan entre las diferentes obras y autorías.

Cuando me sitúo en el rol del público, me gusta percibir el resultado de una exposición como un organismo dentro del cual nos situamos para tener una experiencia que potencie nuestras capacidades subjetivas en torno a una serie de preocupaciones.

Entre sus referentes cita a autores que podemos considerar clásicos entre los comisarios de su generación y algunos artistas que, como él, han desarrollado proyectos vinculados a lugares concretos, en algún caso involucrándose también en la curaduría, y en todo caso trabajando a partir de lo dado, más que de lo ficticio o imaginado: En mi modo de pensar y dotar de identidad a los proyectos curatoriales o de gestión cultural está presente la “estética modal” de Jordi Claramonte, la revisión sobre lo rizomático de Joaquín Ivars, la intersubjetividad de Husserl o los postulados de Paul Ardenne y Nicolas Bourriaud… Pero, de igual modo, me influyen las perspectivas artísticas de Nicolás Paris, Irene Grau o Abraham Cruzvillegas, entre otras/os.

Últimamente han atraído mi atención proyectos curatoriales independientes, como “Cordova”, fundado y dirigido por Cory John Scozzari, situado desde 2017 en Barcelona, pensado para impulsar mecánicas de experimentación “site-specific” (alejado de presiones mercantiles e institucionales), donde el espacio expositivo entra a formar parte determinante de la obra en sí; o investigaciones como las de Andrea Soto Calderón en torno a “la performatividad de las imágenes”.

Como artista, la experiencia del binomio “deslocalizar-localizar” (movimiento – estaticidad) interviene en mi trabajo de forma determinante, porque lo que subyace a todo ello es una voluntad poética por habitar la cotidianidad y por jugar con lo que ya existe, con lo que ya está ahí.

(Volviendo a Nicolás Paris, por cierto, podemos contemplar actualmente en la Galería Elba Benítez el proyecto “Protobosque o un intento para estar juntos”, que no deja de tener mucho que ver con las inquietudes que Mario despliega en su actividad curatorial: aborda el espacio como oportunidad para generar aprendizajes individuales y colectivos).

A la hora de explicarnos algunas de las propuestas fundamentales en las que hasta ahora ha trabajado, cita Guixeras una de las últimas muestras abiertas en el Museo Florencio de la Fuente y proyectos que ha comisariado en Córdoba y en Madrid, el primero colectivo y el segundo individual: Desde 2021, dirijo el Museo de Arte Contemporáneo Florencio de la Fuente de Huete (Cuenca). Se trata de un museo situado en el entorno rural de la Alcarria conquense, en el que tratamos de poner el foco en proyectos donde las identidades que la sociedad occidental ha impuesto tradicionalmente a lo natural y lo cultural se diluyen.

Intentamos proyectar diálogos sostenibles entre lo urbano y lo rural, así como generar tejidos entre artistas muy jóvenes (Javier Marte, María Mrntrd…) y artistas de larga carrera (Isidro Blasco, Mario Mankey, Montse Gómez-Osuna, Christian Villamide, María Aranguren…), a través de diferentes modos de acción (exposiciones, residencias, talleres, eventos de arte relacional, intervenciones…). En ellos, el contexto específico del museo siempre adquiere relevancia de uno u otro modo.

Christian Villamide. El sueño del topógrafo. Spirit Level. MAC Florencio de la Fuente, Huete, 2021
Christian Villamide. El sueño del topógrafo. Spirit Level. MAC Florencio de la Fuente, Huete, 2021
Christian Villamide. Esplendor nihilista. Spirit level. MAC Florencio de la Fuente, Huete, 2021
Christian Villamide. Esplendor nihilista. Spirit Level. MAC Florencio de la Fuente, Huete, 2021

En este contexto, el pasado mes de marzo se inauguró en el Museo “UMBRAL”, un proyecto expositivo del joven artista conquense Jorge Carrasco, del que soy comisario. Se trata de un proyecto fotográfico donde las relaciones entre la imagen, lo corporal y lo espacial se estrechan y toman diferentes formas, acercándonos a una noción tanto personal como comunitaria de entornos pertenecientes a la Alcarria. Atendemos a escenas que pertenecen al pasado, a lo vaciado, al silencio. Vemos cómo la huella del ser humano se mimetiza y participa de igual a igual con diferentes agentes naturales de un modo muy diferente a como lo hacemos ahora.

Jorge Carrasco. UMBRAL. MAC Florencio de la Fuente, Huete, 2023
Jorge Carrasco. UMBRAL. MAC Florencio de la Fuente, Huete, 2023
Jorge Carrasco. UMBRAL. MAC Florencio de la Fuente, Huete, 2023
Jorge Carrasco. UMBRAL. MAC Florencio de la Fuente, Huete, 2023
Jorge Carrasco. UMBRAL. MAC Florencio de la Fuente, Huete, 2023
Jorge Carrasco. UMBRAL. MAC Florencio de la Fuente, Huete, 2023
Jorge Carrasco. UMBRAL. MAC Florencio de la Fuente, Huete, 2023
Jorge Carrasco. UMBRAL. MAC Florencio de la Fuente, Huete, 2023

A finales de 2022, comisarié “En todo lugar, memoria y deseo”, una exposición colectiva para el Centro de Arte Contemporáneo Fundación Rafael Botí de Córdoba. Se trataba de un proyecto ambicioso en el que se reunió a ocho artistas jóvenes naturales de esa ciudad (Laura Vinós, Fran Baena, Irene Anguita, Manuel García Cruz, Carlos Quiralte, Ana de Lara, Chema Rodríguez y Esther Ventura) cuyo trabajo pivotara en torno a tres ideas: nuestra relación con los espacios que habitamos, nuestra relación con la identidad personal y nuestra relación con la sociedad. Esta propuesta, en definitiva, pretende incidir en los distintos modos de relacionabilidad que afectan a nuestro día a día, atendiendo de nuevo a un interés por construir un entorno donde pintura, instalación led, escultura y vídeo potenciaran diálogos entre lo representado y lo presentado, entre lo simulado y lo efectivo.

En todo lugar, memoria y deseo. Centro de Arte Contemporáneo Fundación Rafael Botí, Córdoba, 2022
En todo lugar, memoria y deseo. Centro de Arte Contemporáneo Fundación Rafael Botí, Córdoba, 2022

También a finales del año pasado comisarié un proyecto de intervención pública en Madrid con el artista Ángel Sevillano, mediante el cual se colocaron dieciséis pinturas en diferentes localizaciones del centro de la ciudad, con la intención de que pudieran ser retiradas por la ciudadanía. Se trata de un proyecto que puso en tensión muchas cosas: desde cuestionar las relaciones entre el arte institucionalizado y la intervención pública, hasta convertir al paseante en público y propietario, pasando por repensar el valor de las imágenes en la actualidad, su naturaleza permeable, fugaz, y los sistemas sobrecargados de interpretación de imágenes que se superponen (señal de tráfico, anuncio, ¿obra de arte?, pintada, cartel…).

Ángel Sevillano. Proyecto PRET A PORTER, 2022
Ángel Sevillano. Proyecto PRET A PORTER, 2022

Estará inmerso Guixeras en las próximas semanas en las residencias artísticas del centro que dirige en Huete: En el mes de julio tendrán lugar las IV Residencias artísticas del MAC Florencio de la Fuente, a través de las cuales varios artistas desarrollarán proyectos conectados con el entorno del Museo y de Huete desde diferentes perspectivas que, a partir de los propios procesos, de la exposición y el catálogo, permiten el desarrollo de sus preocupaciones propias, a la par que facilitan reflexiones y actuaciones con implicaciones históricas, políticas, sociales o poéticas en torno al propio contexto de la ciudad. Este año colaboramos por primera vez con LEA (lab of experimental art), en Madrid, para hacer itinerar la exposición resultante y tratar de hacer un doble ejercicio de comisariado recontextualizando todas estas preocupaciones en la capital.

Actualmente estoy queriendo priorizar lempos lentos de investigación y diseño de proyectos. Unos se encuentran cerca de salir a la luz, otros aún requieren de un mayor desarrollo.

Podremos seguir sus pasos, aquí: https://marioguixeras.com/

Residencias artísticas MAC Florencio de la Fuente, Huete, 2022
Residencias artísticas MAC Florencio de la Fuente, Huete, 2022

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