Fichados

Beatriz Dubois

Beatriz DuboisNOMBRE: Beatriz

APELLIDOS: Dubois

LUGAR DE NACIMIENTO: Madrid

FECHA DE NACIMIENTO: 1991

PROFESIÓN: Artista

 

Conocimos a Beatriz Dubois en el verano extraño de 2020; ella fue una de las artistas encargadas de inaugurar el espacio de WeCollect en Conde de Aranda, en la colectiva “CA20 Group Show”, junto a Ana Barriga, Alan Sastre, An Wei, Nuria Mora, Uxío da Vila, Carla Fuentes, Iván Forcadell, Lucas de la Rubia, María Yelletisch, Alba Galocha y Clara Cebrián. El trabajo de esta artista, residente en Barcelona, se basa en la fotografía y el collage; son sus medios para invitarnos a reflexionar sobre las actuales finalidades del arte en una sociedad que, más que en ningún otro momento de la historia, contempla y, sobre todo, consume imágenes de manera constante.

Graduada en Publicidad y Relaciones Públicas, Dubois se ha formado también en fotografía y en escultura del metal en la Central Saint Martins de Londres, en 2019 desarrolló una residencia en Art House Holland de la mano de PAC y ha presentado muestras individuales en Mutuo (Barcelona) y WeCollect (Madrid), además de participar en exposiciones colectivas en centros como la Galería Kreisler y Dust&Soul (Madrid), el Museo de la Pasión de Valladolid, el Centro Cultural Memoria de Andalucía de Granada, el Museo Al Shindagha de Dubai, el Club Matador madrileño, la Fundación Mercedes Calles – Carlos Ballestero de Cáceres o la Casa de Indias de Cádiz. Asimismo, hemos podido encontrar su trabajo en citas como JustMad, FLECHA, Feriarte, SWAB o el White Summer de Girona.

Beatriz Dubois en Chiquita Room. SWAB Art Fair, 2021
Beatriz Dubois en Chiquita Room. SWAB Art Fair, 2021

Se suma Beatriz a nuestros Fichados, tras algunas semanas sin incorporar la fotografía a esta sección, porque queremos saber más de la conjunción de placidez y nostalgia en sus trabajos, sean estos retratos o paisajes y de cómo explora en ellos identidades y modos de construir nuestra relación con la naturaleza. También de esas segundas o terceras vidas que encuentra en las imágenes de archivo, al manipularlas, recortarlas o editarlas para explorar las historias que cobijan o que podrían contar.

Le hemos preguntado por sus inicios; nos explica que le cautiva la fotografía desde la niñez y que, por razones que han evolucionado con el tiempo, la ha compaginado con otras actividades: Desde muy pequeña me ha interesado la fotografía, me formé y, durante unos años, lo compatibilizaba con trabajos en el sector de la comunicación y la gestión cultural. Una necesidad de libertad y creación más profunda me llevó, hace seis años, a dedicarme por completo; durante ese tiempo he participado en una veintena de exposiciones individuales y colectivas. Ahora, irónicamente, trabajo en muchas cosas para compatibilizarlo; para crear sin presión y volver a encontrar la libertad y los beneficios de la creación.

Son diversos los asuntos sobre los que nos invita a meditar en su trabajo, desde el sentido de las imágenes y nuestro modo de apreciarlas o de deglutirlas hasta las lecturas diversas que pueden ofrecernos en relación con lo que somos y con nuestro modo de observar el entorno: Reflexiono sobre la relación del individuo con el exterior y consigo mismo, las identidades, la contemplación pausada del arte frente al consumo masivo de imágenes, el uso que hacemos de las mismas, las dualidades y analogías; la fotografía y el papel.

Reflexiono sobre la relación del individuo con el exterior y consigo mismo, las identidades, la contemplación pausada del arte frente al consumo masivo de imágenes, el uso que hacemos de las mismas, las dualidades y analogías; la fotografía y el papel.

Beatriz Dubois. Prueba negativa
Beatriz Dubois. Prueba negativa

Esa necesidad de pensar sobre lo visual explica que la fotografía sea su disciplina habitual, aunque compagine la cámara y las tijeras. Reivindica que las fotografías pueden nacer de una necesidad y que a ella también puede obedecer el intento de analizarlas y comprenderlas: La base de todas mis obras es siempre la imagen y sus derivados: el papel, el archivo, lo digital, la fotografía, el texto como imagen… Comenzó con cierta ingenuidad, fruto de una pasión por la fotografía, y se desarrolla gracias a una necesidad de entender las imágenes, cómo y por qué las producimos, de qué manera nos buscamos en ellas. En sus manos, la foto es a veces una herramienta narrativa y otras parte de collages dedicados a los espacios mentales y físicos que habitamos; en unos y otros casos, sus trabajos son fruto de procesos de aprendizaje.

Entre sus referentes no encontramos solo fotógrafos; reconoce Dubois que las redes sociales le han permitido conocer a algunos: Mis referencias han ido cambiando… Recuerdo emocionarme hace unos años en exposiciones de Cartier-Bresson o Paul Strand. Ahora, estudio mucho la obra de mujeres artistas que, por técnica o discurso, me interesan, me inspiran o me dan fuerza, como Louise Bourgeois, Fina Miralles, Helena Almeida, Paula Rego o Anni Albers.

Mis referentes coetáneos son infinitos. Gracias a las redes cada semana puedo conocer a alguien nuevo, y siento que además hay una accesibilidad que antes no existía. Poder entablar conversaciones o seguir el trabajo de alguien es algo que ahora damos por sentado, pero es interesante poder conocer artistas de todo el mundo casi personalmente. Últimamente he descubierto el trabajo de Alexandra Barth o María Tinaut.

Beatriz Dubois. Digital
Beatriz Dubois. Digital

A la hora de citar sus principales proyectos hasta ahora, nos cuenta Dubois que entiende su producción como un continuum: Es uno solo y no hermético o circunstancial, sino continuado; es la construcción de mi propia identidad, entender por qué hago las cosas y encontrar nuevos objetivos.

Los inicios son importantes y recuerdo dos muestras: mi primera exposición individual fue en la galería WeCollect, hace seis años. Aprendí mucho y fue una lanzadera, pasé a formar parte de importantes colecciones privadas como la Colección Himalaya, la Colección H.E.F., la Colección Alicia Aza o la Colección Campocerrado, entre otras. Me hace especial ilusión pertenecer a la Colección Himalaya (Julián Castilla viaja con ella por infinidad de instituciones y ciudades así que, sin yo esperarlo, viajo también), no por un tema de presencia o currículum, sino porque cada vez que me escriben para comunicarme una nueva exposición, suele ser rodeada de la obra de fotógrafos que admiro mucho y gracias a los cuales compré mi primera cámara; recuerdo los inicios y reconstruyo el desarrollo, autoconocimiento y aprendizaje de estos años.

Subraya también su participación en SWAB ART FAIR (Barcelona), junto con la Galería Chiquita Room: Es una feria de una calidad y variedad excelente, y cuyo tamaño me permite indagar en todas las galerías y aprender mucho cada año. En 2021 inicié mi relación con Chiquita Room en esta cita, con una obra que rompía bastante con todo lo anterior, por lo que fue un inicio de etapa muy interesante.

Beatriz Dubois. Serie Dancing or fighting
Beatriz Dubois. Serie Dancing or fighting
Beatriz Dubois. Serie Dancing or fighting
Beatriz Dubois. Serie Dancing or fighting

Aunque conciba su trajo como un todo, sí podemos hablar de varias series: en Dancing or fighting trabajó a partir de páginas descontextualizadas de libros y revistas, planteando con ellas ejercicios de asociación y repetición que llamaban nuestra atención sobre la fragilidad de nuestra percepción de las imágenes y el sentido individual que cobran para nosotros; Ficción disminuida, por su parte, se estructuró como una red social analógica con la que trató de estudiar nuestros mecanismos de funcionamiento en el medio digital: Busco imitar la sensación de recibir muchas imágenes al mismo tiempo; el consumo abrumador y muchas veces involuntario de fotografías; un scroll infinito, y una contemplación que se reduce a meras impresiones. Y hacía referencia a nuestro manejo de tiempos y recuerdos por la vía de la imagen: Ahora, la fotografía es un mecanismo de memoria, pero irónicamente nos hace olvidar. No nos invita a una relación con el pasado, sino a un encuentro fortuito con el presente. En las redes, las publicaciones no representan memorias del pasado, sino que la fotografía es presente, acaba de ser así. En este caso, los fragmentos sí son recuerdos, pero solo recordarás algunos.

Hablar consta de imágenes trenzadas que exigen nuestra demora al contemplarlas, desafiando nuestra habitual mirada rápida, y en ellas incorporó textos: Esta serie ha coincido con una necesidad de añadir escritos a mi proceso didáctico y creativo, ya que mis referencias han sido, durante mucho tiempo, puramente visuales. En este desarrollo, he reafirmado mi admiración por las palabras y su capacidad, e incluso su ambigüedad ocasional me ha resultado atractiva y poderosa. Dentro, por su lado, se refería a nuestra necesidad de relacionarnos con los demás, con nuestro entorno y ojalá también con nosotros mismos: He querido expresar nuestra facilidad de ruptura con la naturaleza y los orígenes del hombre, y plantear qué se encuentra cada uno dentro durante su crecimiento. Debemos indagar en nuestro propio yo para conocer nuestras raíces humanas, y solo entonces encontraremos la satisfacción e incluso la conexión divina con nuestro creador.

En Habitar(se), focalizaba su atención en espacios, arquitecturas y sobre todo en nuestros modos de vivirlos y también de habitarnos a nosotros mismos. Se valió de collages: No solo la ciudad es la forma artística del collage por excelencia (un montaje de texturas, épocas, impresiones, rutinas…), sino que el hombre encuentra estimulantes los edificios y las ciudades antiguas porque le ubican en la historia; museos del tiempo habitados y re-habitados. Por eso, he utilizado fotografías olvidadas de monumentos, paisajes, edificios y calles, habitándolas con geometrías de color que representan la huella actual; un apropiacionismo que da vida a estos espacios.

Queremos saber en qué trabaja ahora Beatriz: Después de años utilizando imágenes de archivo con técnicas de collage y centrándome en lo formal de la obra, he vuelto a dar protagonismo a la fotografía tomada por la cámara, a la acción, no tanto al documento. Estoy utilizando una Mamiya RB67 cuyo peso y técnica me posicionan en el momento de la fotografía de una manera diferente, con película de medio formato que recorto y manipulo.

Podéis seguir sus pasos aquí: www.beatrizdubois.com

Beatriz Dubois, 2022
Beatriz Dubois, 2022

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