La Fundación MAPFRE ha anunciado esta semana las exposiciones que nos ofrecerá, en sus salas de Madrid y Barcelona, en 2026; serán trece.
En su sede de Recoletos (Madrid), como es ya habitual, la temporada comenzará con una muestra de pintura, centrada en el arte de finales del siglo XIX y principios del XX, y con otra dedicada a la fotógrafa estadounidense Helen Levitt. La exhibición pictórica será “Anders Zorn. Recorrer el mundo, recordar la tierra”; Zorn fue quizá el artista sueco más representativo en torno a 1900, gracias a su virtuosismo técnico, y esta retrospectiva repasará su trayectoria desde sus primeras acuarelas, sus viajes de formación y su asentamiento en París —donde participó del triunfo de la pintura naturalista— hasta su retorno a Suecia en 1896 y sus viajes por América. Veremos también obras significativas de su periplo por España: realizadas en Sevilla, Cádiz y Granada, o vinculadas a su amistad con Joaquín Sorolla o Ramón Casas. La muestra se organizará con la colaboración de la Hamburger Kunsthalle, el Zornmuseet de Mora y el Nationalmuseum de Estocolmo.
En paralelo, este espacio acogerá esa otra antología de Helen Levitt, que durante seis décadas fotografió la vida urbana en Nueva York, siendo su predilección los niños mientras jugaban. Fue una maestra en la captación sensible de gestos, movimientos y emociones. Esta monográfica, que actualmente puede contemplarse en Barcelona, es la primera organizada a partir de los archivos de esta autora, sólo recientemente accesibles para los investigadores. Formarán parte del recorrido sus trabajos mexicanos y aquellos que llevó a cabo en color, desde los cincuenta.

A partir de junio, también en Madrid, podrán admirarse las fotografías de Richard Avedon y Alejandro Cartagena. Las del neoyorquino no corresponderán a su faceta más celebrada, la moda, sino a la vertiente más desconocida de su legado: retrató a mineros, vaqueros, feriantes o vendedores, solos o en grupo, ante fondos blancos, con el fin de subrayar sus expresiones y psicología. Ofreció en este conjunto una imagen del Oeste americano muy distinta a la habitual. “Richard Avedon – In the American West” está organizada por la Fondation Henri Cartier-Bresson en colaboración con Fundación MAPFRE, con obras en préstamo de The Richard Avedon Foundation.
En cuanto al dominicano, residente en México, Alejandro Cartagena, la Fundación revisará más dos décadas de su trayectoria, en la que ha querido cuestionar la noción de instante decisivo de Cartier-Bresson, optando por la serialidad y la multiplicidad de perspectivas para abordar las realidades complejas de México. Se expondrán series como Suburbia, Mexicana, Carpoolers y la trilogía sobre la frontera, incidiendo en la voluntad del autor de poner de relieve determinados fenómenos sociales y medioambientales, ligados a la identidad, la memoria y la transformación del paisaje. En este caso, coproduce el San Francisco Museum of Art.

Por último, la Fundación MAPFRE albergará dos exposiciones sobre las mujeres y el prerrafaelismo y la relación entre artistas de vanguardia y autores con problemas de salud mental.
“Prerrafaelismo: itinerarios femeninos (1850-1914)” ahondará en la respuesta de las mujeres artistas al surgimiento del prerrafaelismo en Gran Bretaña, muy distante al academicismo de entonces. La muestra examinará cómo las pintoras de la sociedad victoriana abordaron o adoptaron rasgos de ese movimiento, a través de óleos, acuarelas, dibujos y grabados que se expondrán junto a fotografías, textiles, bordados, esmaltes y vidrieras.
Por su parte, “La otra orilla de la vanguardia” analizará los nexos entre la obra realizada por creadores que fueron pacientes psiquiátricos y el arte de vanguardia. En concreto, esta propuesta se centra en la colección de Hans Prinzhorn, un psiquiatra, historiador del arte, poeta y dibujante que trabajó temporalmente en el hospital psiquiátrico de la Universidad de Heidelberg, donde coleccionó creaciones de algunos de sus pacientes y los catalogó en el libro Expresiones de la locura.
Esos trabajos se relacionarán con obras de artistas como Paul Klee, Kirchner, Schwitters o Max Ernst. Se estudiará la apropiación de ese legado por parte del nazismo en su campaña contra el “arte degenerado”, así como la más tardía revalorización de esas piezas en la posguerra, sobre todo a través de figuras como Jean Dubuffet, fundador del Art Brut.

En Barcelona el año comenzará con las exposiciones “Walker Evans. Now and Then” y “Pérez Siquier. Colecciones Fundación MAPFRE”. La primera reunirá fotografías y proyectos representativos de toda la trayectoria de Evans, desde sus autorretratos de los veinte hasta las Polaroid de los setenta, junto con libros y publicaciones que prueban su capacidad de observación. Además de documentar la sociedad de su país, cuestionó la naturaleza de la fotografía y la percepción de la realidad.
Por su parte, la exposición dedicada a Pérez Siquier contará con imágenes de sus series más conocidas, como La Chanca, Informalismos, La playa, Encuentros, Trampas para incautos y La Briseña. La Fundación retoma así la muestra que brindaron a este autor el año 2020, clausurada muy pronto debido a la pandemia.

En verano llegarán a KBr Minor White y Joaquín Tusquets de Cabirol. El primero fue una figura muy relevante en la fotografía estadounidense del siglo XX, por las innovaciones que introdujo y por su labor docente en instituciones como la California School of Fine Arts, la George Eastman House y el MIT. Además, fue cofundador, editor y director de la revista Aperture, soporte en buena medida del debate fotográfico a mediados del siglo pasado. Abarcó diversos géneros (naturaleza, retrato y fotografía de calle), desde la introspección y la espiritualidad. Esta exhibición se verá, asimismo, en Madrid.
Respecto a la muestra “Joaquín Tusquets de Cabirol. La forma elocuente”, forma parte del programa de la Fundación MAPFRE para la conservación y difusión de archivos fotográficos catalanes. Se ha recuperado el legado de un autor aficionado que merece ser conocido, publicado y expuesto tras décadas de olvido; dicho archivo está formado por aproximadamente mil copias y cuatro mil negativos realizados entre 1940 y 1960.
La programación de KBr finalizará el año que viene con una exposición de la fotógrafa neerlandesa Dana Lixenberg y una nueva edición de KBr FLAMA, programa destinado a potenciar la actividad de fotógrafos noveles. De la primera veremos trabajos realizados en Estados Unidos desde 1993 hasta la actualidad, dedicados a iconos culturales y a las comunidades marginadas.

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