Solo un año después de ser nombrada presidenta de la agencia Magnum, y a dos de exhibir en el Museo Universidad de Navarra la serie con la que se sumó al programa Tender puentes, Aleatorias Vulgaris, Cristina de Middel presenta en la Sala Canal de Isabel II de la Comunidad de Madrid “Cartas al director”, una muestra, comisariada por Semíramis González, que recuerda sus inicios como fotoperiodista a la vez que incide en el estudio en su obra de las relaciones entre fotografía y verdad, entre lo documental y lo conceptual, probando que muy a menudo las distancias entre lo que es ficticio y lo que no lo es no son fáciles de establecer.
Si las cartas al director son, en la prensa tradicional, misivas donde los lectores comentan asuntos de actualidad y exponen sus loas o quejas al periódico, esta exhibición se configura como una propuesta de tratamiento visual alternativo a los temas que continúan copando mayoritariamente sus páginas y los informativos (guerras, desplazamientos migratorios, violencia); un tratamiento abierto a la diversidad de lecturas y a las opciones creativas del espectador en cuanto a la interpretación de las imágenes.
La propia trayectoria de De Middel vendría a probar las posibilidades muy extensas de esa otra manera de aproximarse a la información y a la Historia: formada en Bellas Artes, y especializada en dibujo, trabajó como dijimos, en sus primeros años de carrera, como fotoperiodista para varios diarios españoles, pero sus imágenes, también las más tempranas, siempre fueron más allá del reportaje y de la voluntad informativa. Jugaba con los métodos compositivos, incorporó un sentido estético personal y buscó aprovechar al máximo las sendas que la fotografía ofrecía a la hora de contar, de explicar lo evidente y lo que no lo era.
En su obra resulta fundamental la noción de narratividad, como se aprecia en series tan iniciales como Vidas y milagros de Paula P., que pudo verse en 2009 en el Museo de la Universidad de Alicante, su ciudad: capturaba la realidad del ejercicio de la prostitución desde una perspectiva lo más honesta posible, ajena al morbo, que hacía hincapié además en la doble moral en las consideraciones de esta actividad, tan relegada habitualmente de las miradas y el debate como omnipresente a pie de carretera. Junto a este conjunto y en relación con él, veremos igualmente en Canal el trabajo Gentlemen’s Club (2015-2023), por el que retrató hasta a un centenar de clientes que, en todo el mundo y en circunstancias muy diferentes, recurrieron al pago por sexo: de Río de Janeiro a Los Ángeles, Ámsterdam o Bombay, de la juventud a la tercera edad. Recogió, además, sus testimonios personales.
Aproximadamente en el mismo periodo, llevó a cabo la fotógrafa la serie Journey to the center, que le valió el Prix Virginia: acompañó a migrantes que se trasladaban desde el sur de México hasta la frontera de este país con Estados Unidos, una de las rutas más peligrosas para los desplazados pero también una de las más concurridas. El propósito de De Middel en este proyecto era apuntar a los enormes prejuicios sostenidos en torno a quienes migran: deseaba subrayar su valentía y su sacrificio frente a quienes asocian el esfuerzo de sus caminatas al crimen. Al conjugar escenas reales con otras recreadas daba lugar a relatos con diversas capas que nos planteaban más dudas que respuestas cerradas, muy distantes de los juicios sin matices.
Una de sus series más recientes en Canal es The Kabuler (2022), en la que trabajó junto a Lorenzo Meloni, también fotógrafo de Magnum: su eje es la Guerra de Afganistán. A principios del año pasado, tras el regreso de los talibanes y la retirada de las tropas internacionales, ambos recorrieron por completo este territorio; era un periodo en el que aquel grupo guerrillero quería acreditarse como entidad política capaz de gobernar, y estos autores pudieron hablar (quizá de forma más abierta de lo que hoy podrían) con soldados, políticos y ciudadanos, reuniendo sus opiniones sobre los cambios que afectaban a su país, así como una recopilación de indicadores sociales, con el fin de ofrecer un panorama más completo sobre la realidad afgana.
Con el material recogido, De Middel y Meloni elaboraron una publicación con formato de revista en la que queda patente la perspectiva más documental del italiano y la más conceptual de la española y que subraya, además, las posibilidades de conexión de texto e imagen y la multiplicidad de caminos para interpretar un conflicto, un país o una identidad nacional. Hoy Afganistán ha perdido vigencia en las portadas, pero quizá la atención de los medios sea más urgente ahora: el deterioro del respeto a los derechos humanos ha coincidido con una grave crisis alimentaria.
El compromiso a la hora de abordar asuntos tan complejos como estos y no otros se hace compatible, en el caso de la alicantina, con la ironía y, haciendo honor al título de la muestra, se nos propone intervenir en ella antes de marcharnos: rompiendo esa unidireccionalidad criticada, podremos elaborar nuestras propias noticias que formarán parte de un periódico; la aportación de los visitantes contribuirá a dar sentido a una información rara vez indiscutible.
Cristina de Middel. “Cartas al director”
c/ Santa Engracia, 125
Madrid
Del 29 de septiembre de 2023 al 14 de enero de 2024
