Será a finales de la década de los sesenta cuando la obra de Salaberri se dé a conocer, dentro del grupo denominado por María Moreno Gallau La Escuela de Pamplona, formada por el artista que nos ocupa y Juan José Aquerreta, Javier Norra y Pedro Osés. El tema fundamental en su obra es el paisaje, tanto rural como urbano. En su realización existe cierta sintonía con la estética del pop art, tanto por el empleo del color dispuesto en manchas planas, lo cual evita en cierto sentido el volumen de los objetos representados, como por la utilización de los contornos bien definidos. Poco a poco su pintura evoluciona y presenta desoladas vistas de cuidad que entroncan con la pintura metafísica italiana, ya que los espacios definidos por ambas guardan una relación que se basa en la atemporalidad y quietud de los mismos. Entre sus galardones se encuentra el Primer Premio de la Bienal de Pamplona en 1984. Realiza su primera exposición individual en 1973 en la Sala Cultural Can de Pamplona, presentándose después en Madrid, Vitoria, Pamplona, Bilbao, etc. También ha participado en importantes muestras colectivas dentro y fuera de nuestras fronteras.