Hace unos meses el MACBA de Barcelona nos anunciaba la puesta en marcha de PANORAMA, una nueva serie de proyectos transdisciplinarios que tendría como fin favorecer la colaboración y el diálogo entre creadores y agentes culturales en el contexto del propio centro. En estas exposiciones se pondría el foco en las prácticas artísticas actuales de la capital catalana y de su entorno, desde diferentes perspectivas, y se fomentaría la creación de obras de nueva producción y su presentación junto a propuestas recientes mostradas por primera vez en la ciudad. Cada edición de PANORAMA, se anticipaba, estaría dirigida por un equipo curatorial distinto, formado por un miembro del equipo del MACBA junto a un comisario o colectivo independiente.
Pues bien, la primera exhibición fruto de este proyecto puede visitarse ya en el Museo: se trata de “Apuntes para un incendio de los ojos”, ha sido comisariada por Hiuwai Chu (MACBA) y Latitudes (Mariana Cánepa y Max Andrews) y no aborda una única temática, sino que entrelaza miradas relativas a asuntos varios, como la noción de lo urbano que se maneja desde las propias ciudades, las disidencias de género o los conceptos de reparación y pertenencia en el ámbito de lo individual o lo colectivo; aunque algo hay de nexo común entre los trabajos presentados: la reflexión sobre la iconoclastia y las posibilidades expresivas de los códigos lingüísticos sensoriales.
Las diecisiete propuestas artísticas seleccionadas pertenecen a Ana Domínguez, El Palomar (Mariokissme y R. Marcos Mota), Laia Estruch, Arash Fayez, Antoni Hervàs, Rasmus Nilausen, nyamnyam (Ariadna Rodríguez e Iñaki Álvarez) con Pedro Pineda, Claudia Pagès, Aleix Plademunt, Marria Pratts, Stella Rahola Matutes, Eulàlia Rovira, Ruta de autor (Aymara Arreaza R. y Lorena Bou Linhares), Adrian Schindler, Rosa Tharrats, Gabriel Ventura y Marc Vives y encontraremos entre ellas pinturas, esculturas, trabajos sobre papel, videoinstalaciones, performances, fotografías y piezas textiles estructuradas en un montaje nacido de la colaboración entre sus propios autores y los comisarios. El título de la muestra procede de un poemario de Gabriel Ventura, pero indica también que esas piezas se consideran apuntes, notas al pie, sobre multiplicidad de asuntos contemporáneos, y que a partir de ellas se invita al espectador a cuestionarse maneras de mirar y maneras de vivir.
Su recorrido comienza con Hervàs, que presenta un contundente portal de papel maché que se inspira en el juego de mesa El Chino y en la historia del Teatre Arnau, inaugurado a fines del siglo XIX y convertido con los años en una de las salas de variedades y cabaret más célebres de Barcelona; hoy en proceso de recuperación. Este proyecto conecta con un gran mural que se ha situado enfrente de esa sala y que homenajea a los bares y teatros, de ayer y de hoy, del Paral·lel. Otro teatro sigue a ese portal: el de dudas de Rasmus Nilausen, en su caso basado en el teatro de la memoria de Giulio Camillo, el filósofo renacentista que invirtió la perspectiva del teatro clásico ubicando al espectador en el escenario central, con vistas a siete filas de siete imágenes en un intento (que no logró) de representar la totalidad del conocimiento humano y del cosmos mismo.
Haciendo alusión al nombre de este ciclo expositivo, Panorama, “Apuntes para un incendio de los ojos” también plantea una exploración conceptual e histórica de las grandes pinturas de 360º llamadas desde el siglo XVIII panoramas, en propuestas que inciden en la experiencia situada, las relaciones espaciales entre el escenario y el auditorio y el bucle como narrativa. Algunas de las obras seleccionadas nos ofrecen muchas capas de lectura y entablan entre sí conexiones inesperadas entre pasado, presente y futuro; es el caso de La ciutat com una exposició, de Ruta de autor, que se nutre de una investigación de archivo sobre los panoramas de la Exposición Universal de Barcelona de 1888 y cobra forma de un diario que es, en realidad, una exposición portátil. Otra artista que se ha inspirado en lugares emblemáticos de Barcelona, en su caso del puerto comercial (rompeolas, edificio de Aduanas y World Trade Center), es Claudia Pagès, que en Gerundi Circular ha creado una hipnótica instalación de vídeo de 360º dedicada a las rutas marítimas globales, el flujo en ellas de personas y mercancías y el argot legal asociado. Enlaza así lo local y lo global en lo inmersivo, y esta última cualidad la mantiene también el trabajo de Marc Vives, que observó la Costa Brava desde el mar, fijándose tanto en su belleza salvaje como en sus construcciones menos estéticas en el vídeo SSSSS (por las iniciales en inglés de arena, mar, sol, sexo y sangría).
En esa línea, otras obras bucean en nuestras relaciones particulares con el planeta, el universo en sentido amplio o el ser en un enfoque íntimo, temas relacionados con los mencionados de la pertenencia, la reparación o la disidencia de género. Aleix Plademunt nos trae Matter, un proyecto enciclopédico, en el que viene trabajando desde hace ocho años, que profundiza en los orígenes de la vida, el conocimiento y el lugar del individuo en un universo complejo. Por su parte, O de AKAAL / SELENE \ ULURU, de Rosa Tharrats, hace referencia a la fragilidad de los océanos y de las comunidades que dependen de ellos, convirtiendo las columnas del museo en mástiles de barco a los que incorpora velas de retales, conchas, plantas secas y bioplásticos, elementos que podrían reducir la contaminación marina.
Otra columna es La perla, de Eulàlia Rovira: se trata de una columna desactivada, en palabras de la artista, una pieza que permanece suspendida en el aire, sin funciones estructurales ni metafóricas. La acompaña La llaga, una serie de collages de textos y fotografías realizados a partir de la investigación de la esta autora sobre la construcción del edificio del MACBA a inicios de los años noventa y sobre la regeneración posterior del barrio de El Raval.
En los vínculos entre los recursos humanos (los trabajadores del museo) y los naturales se adentraron Pedro Pineda y nyamnyam, en un trabajo colectivo: un grupo de profesionales del MACBA, con funciones distintas, ha participado en talleres en los que unos troncos de árboles, obtenidos en una iniciativa forestal sostenible, se transformaron en mobiliario que los propios participantes de los talleres irán cambiando mes a mes mientras dure esta exhibición.
Contemplaremos también Schreber is a woman, un audiovisual a doble pantalla de El Palomar sobre el caso del juez alemán Daniel Paul Schreber, que fue encerrado en un manicomio tras ser nombrado presidente del Tribunal Supremo al afirmar que se sentía mujer, así como Apolis y Limbo, de Arash Fayez, y Tetuan, Tetuán, de Adrian Schindler, sobre identidad y representación. Fayez revisa los limbos legales en los que ha estado inmerso, mostrando la documentación oficial relativa a su arresto en Estados Unidos en 2014, hasta su llegada a la Unión Europea en 2018, mientras Schindler estrena el primer filme de una trilogía experimental relativa a los fantasmas contemporáneos del pasado colonial de España en Marruecos. Incluye un episodio barcelonés con escenas rodadas en la Plaça Tetuan y en las salas del MNAC.
Así como Gabriel Ventura, el poeta autor de Apunts per a un incendi dels ulls, incitaba a sus lectores a adoptar una definición expandida de la visión, esta exposición del MACBA también quiere conducirnos a expandir nuestros sentidos. Así, la instalación Fig Juice de Stella Rahola Matutes presenta un raro sistema sensorial de conexiones entre formas producidas por el hombre y materiales semiorgánicos y el collage de audio Ocells perduts, de Laia Estruch, consta de una gran red que atraviesa una de las salas del Museo, generando un escenario en el que se desarrollarán ensayos abiertos en un intento de acercarse a los cantos de las aves migratorias que anidan en Barcelona. La energía que deriva de las esculturas de neones de Marria Pratts en Sento una música dintre del cap (transformació d’un pensament borrós), por su parte, hace referencia a las contradicciones del paisaje urbano y a los desafíos de vivir bajo la amenaza de la gentrificación.
Concluye el recorrido aludiendo al vínculo que conecta la exposición física con su versión online: al concepto gráfico que Ana Domínguez ha diseñado para PANORAMA y para su primera edición, a modo de explosión sensorial.
“Apuntes para un incendio de los ojos”
Plaça dels Àngels, 1
Barcelona
Del 22 de octubre de 2021 al 27 de febrero de 2022
