José María Larrondo, la forma del concepto

La Casa Encendida muestra sus últimas obras

Madrid,
José María Larrondo
José María Larrondo

Nació en Villafranca de los Barros en 1958 y, aunque su obra presenta características lo bastante personales como para considerarlo un artista singular de difícil adscripción a cualquier colectivo, José María Larrondo dio sus primeros pasos como artista, a mediados de los ochenta, bajo el paraguas de la llamada Nueva Figuración sevillana.

Escultor además de pintor y muy interesado por aunar tradición y modernidad, Larrondo atrae al espectador a través de lienzos de atractiva superficie poblados de metáforas, de claves más o menos ocultas con mensajes no siempre positivos que, en segundas y siguientes lecturas, tiene que probar a descifrar.

La Casa Encendida muestra, hasta el 16 de enero, sus últimos trabajos en la muestra “Libro de horas de José María Larrondo”, que reivindica su obra en el actual contexto de resurgimiento del género pictórico desde nuevos y más abiertos parámetros en los que los formatos se diluyen.

En esta exhibición, que se abrió en pasado viernes, veremos cómo Larrondo ha tratado de compaginar la reivindicación del lienzo como soporte con el recurso casi mágico del trampantojo, alusivo a la vertiente simbólica de la pintura y a su capacidad para jugar con nuestra mente e invitarnos a reflexionar sobre dónde empieza lo imaginado para dar paso a lo real (no solo en el cuadro, también en la vida).

Nunca ha abandonado la figuración, pero podemos considerar su pintura conceptual y abierta a múltiples interpretaciones, como lo son muchas obras barrocas, estilo que ha tenido gran peso en la producción de Larrondo, que cuida tanto la presentación matérica de sus obras, a través de técnicas depuradas,  como los conceptos que en ellas subyacen. El color también juega un papel fundamental; un color, según palabras del extremeño, no pensado sino sentido.

En palabras de José Guirao, comisario del proyecto, pocos pintores utilizan el color como él, de forma en apariencia tan impura, alejado de efectos y protagonismo a primera vista, pero pocos destilan tanta verdad de esa impureza…El color en sus obras no sólo es inusual e intenso, se nos antoja, también, infinito.

Las temáticas que aborda son variadas (desde la violencia a la religión pasando por el poder y abordando diversas cuestiones referidas a las múltiples caras de la naturaleza humana) y pueden vincularse con lo literario o con el cine, por lo que en muchas ocasiones sus obras tienen un carácter parcialmente narrativo, con la ayuda de sus títulos, que suelen apuntar a misterios por resolver.

Si podéis, haceos con el catálogo de la muestra: Antonio Gamoneda, Soledad Puértolas, Alfredo Taján, Antonio Lucas, Estrella de Diego, Bárbara Jacobs o Javier Montes, entre otros han interpretado de forma libre algunas de las pinturas expuestas.

 

Comentarios