Inéditos 2022: de archipiélagos y maldades

Aina Pomar Cloquell y Núria Gómez Gabriel presentan sus proyectos en La Casa Encendida

Madrid,

Superadas las dos décadas de andadura, el programa Inéditos de La Casa Encendida, destinado a impulsar las carreras de los jóvenes comisarios y sus proyectos de arte actual, acaba de presentar la labor de sus dos últimas premiadas. Un jurado formado por Andrea Lissoni, director de Haus der Kunst; Rosa Lleó, directora de The Green Parrot y el comisario Miguel López seleccionó a la mallorquina Aina Pomar Cloquell y a la barcelonesa Núria Gómez Gabriel; la primera ha ideado la muestra “Devenir isla”, dedicada a las formas de relación que se generan en los archipiélagos y a sus fronteras líquidas y la segunda exhibe “Las malas”, centrada en los materiales, comportamientos, deseos y temores que, con mayor o menor justicia, se han asociado a esa noción de maldad.

La propuesta de Pomar Cloquell se ha planteado, justamente, como archipiélago artístico: los proyectos de los siete artistas que la componen son autónomos a la vez que dialogan entre sí y constituyen un todo, una red porosa de ideas y materiales. Por caminos más o menos explícitos o conceptuales, todos ellos tienen que ver con las islas, que nuestro inconsciente asocia a lo remoto, o con los archipiélagos en sí, como espacios de límites difusos.

Contempla la comisaria las zonas insulares, siguiendo la estela del filósofo Deleuze, como universos en movimiento constante, en continuo proceso de evolución y en relación vital con un mar que tampoco empieza ni acaba y en el que casi todo puede suceder y, de hecho, está sucediendo. Suele incidirse en lo que tiene de barrera natural, pero Pomar ha elegido abordarlo como gran conector.

"Devenir isla". La Casa Encendida, 2022
“Devenir isla”. La Casa Encendida, 2022

Seguramente el trabajo en esta exhibición más relacionado con él, con el mar, es Inhale Exhale (Self-Breathing Kit) de Paulo Arraiano, un vídeo que este autor portugués llevó a cabo durante la pandemia, a modo de cápsulas que día a día enviaba a sus contactos a través de whattsapp para recordarles, en medio de la confusión, la necesidad de parar, (sacar la cabeza) y respirar. The Complete Guide to Nothingness, pieza textil de Carolina Grilo Santos, conjuga por su parte texto, ilustración y gráficos para recrear una página de enciclopedia infinita dedicada a las gafanhas portuguesas, aunando a su vez sus memorias infantiles, la magia, la ciencia y los procedimientos del storytelling, nacidos en el fondo de la tradición oral como medio imperecedero, también flexible y abierto, de transmisión del conocimiento.

El potencial de las orillas, y de lo liminal, lo explora Ángela Jiménez Durán en Bajo la arena, una pieza inspirada en la obra teatral El público, de García Lorca. Propone dos dramas: uno al aire libre y otro precisamente bajo la arena; en este último podrá darse vía libre a nuestras fantasías y deseos, a maneras alternativas de proyectar el futuro.

"Devenir isla". La Casa Encendida, 2022
“Devenir isla”. La Casa Encendida, 2022

Otros caminos para el devenir también nos invita a imaginar Alberta Whittle en Dreaming of Other Ways, conjunto de collages digitales en los que el océano se nos ofrece como espacio de sanación, pero también como evidente tumba. Presenta este trabajo un trasfondo anticolonial: investigó la artista sobre un gusano que se alimentó de la madera de algunos barcos de la metrópolis llegando a hundirlos. Del dúo formado por Julia Fuentesal y Pablo M. Arenillas veremos tres esculturas que evocan la fluidez marina a la que hacía referencia el trabajo de Jiménez Durán, a la vez que juegan con dualidades entre conceptos aparentemente opuestos: lo opaco y lo transparente, lo sólido y lo frágil.

Por último, Vanessa da Silva y Lotte Andersen apelan a la permeabilidad de los cuerpos, en relación con esos archipiélagos siempre transformados por el mar, en los trabajos Equinoxes y Dance Therapy. El primero es una obra translúcida, formada por varias capas textiles, en la que se yuxtaponen símbolos relativos a varias regiones del mundo, como si fuese este un estandarte para la pertenencia colectiva, al igual que su título alude a los cambios de estación, periodos en los que la duración del día y la noche es la misma en todo el planeta.

Dance Therapy nos lleva a clubs de baile en los que podríamos encontrar ciertos paralelismos con el mar: el movimiento ejerce en ellos un rol terapéutico, los cuerpos danzan autónomamente pero cobran sentido en su dimensión colectiva y en los ritmos se diluyen las identidades, lo emocional y lo físico.

"Devenir isla". La Casa Encendida, 2022
“Devenir isla”. La Casa Encendida, 2022

“Las malas”, la exhibición que ha comisariado Núria Gómez, toma su título de la novela de Camila Sosa Villada para reflexionar sobre esa idea, la de maldad, y especialmente sobre nuestros modos de interpretarla, sobre aquellos comportamientos, objetos o personajes a los que hemos llegado a asociarla. Hemos de fijarnos en el diseño espacial de la muestra, que viene a servir a su temática: invirtiendo la orientación de los templos, conforma una cruz latina invertida, que algunos consideran cruz satánica.

Se inicia el recorrido, en su misma puerta de entrada, con la instalación El frío antes de caer de dj_Sônia, dúo formado por Blanca G. Terán y Ángela Millano. La horizontal habitual de los cuerpos, y de los edredones, deviene ahora verticalidad y el peso muerto del descanso ya no es tal en esa línea, sino el trabajo de muchos músculos y articulaciones. Estas artistas han formado parte de un club de durmientes que se unía para pasar la noche velando por el sueño mutuo y examinando a dónde les llevaban, y qué estados de conciencia generaban, esa suerte de vigilias funcionarias.

Tras ese telón nos espera la proyección del vídeo Boxer, Biker, Ring, Cycle de Elif Satanaya, una ficción de corte gótico sobre amor y muerte en la que dos personajes buscan deshacerse de sus propios demonios, y también la instalación escultórica, maloliente, Hair of the dog de Marian Garrido, compendio de suciedades procedentes del entorno cotidiano de la artista y de materiales que sugieren ruido, velocidad y basura.

"Las malas". La Casa Encendida, 2022
“Las malas”. La Casa Encendida, 2022

Proyectos escultóricos han traído también a La Casa Encendida Lucía C. Pino y Álvaro Chior. La primera muestra la pieza Anhelo 2, elaborada con componentes frágiles, que nos invita a contemplar lo transitorio como espacio habitable y no solo fugaz; el segundo, en WASD y RECOIL, sugiere los gestos de entrenamiento, marcados por la repetición y la superposición, de los usuarios de videojuegos de shooting o recrea las interfaces de estos mediante soportes de televisión o neumáticos, material que también estaba presente en el trabajo de Garrido.

"Las malas". La Casa Encendida, 2022
“Las malas”. La Casa Encendida, 2022

La instalación, solo aparentemente vacía, Round O, de Raquel G. Ibáñez, nos invita a considerar los instantes de knockout en los deportes de contacto como espacio-tiempos de suspensión de la conciencia en los que los límites entre la vida y la muerte no son claros. Escucharemos allí respiraciones, esa línea fina y salvífica. Por último, la proyección de Andrea González Damos vueltas en la noche y somos consumidas por el fuego aúna las anteriores incursiones en la ruta del bacalao de la autora con voces que apelan a la fe y a la necesidad de escuchar, no solo ruido.

“Las malas” es el fruto último de un proceso de investigación curatorial sobre los llamados materialismos góticos que Gómez Gabriel inició el año pasado tras serle concedida una beca Encura V. Una nueva convocatoria de Inéditos, por cierto, ya está abierta.

"Las malas". La Casa Encendida, 2022
“Las malas”. La Casa Encendida, 2022

 

“Devenir isla”

“Las malas”

LA CASA ENCENDIDA

Ronda de Valencia, 2

Madrid

Del 27 de mayo al 18 de septiembre de 2022

 

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