Estudió pintura y arquitectura en la Escuela Superior de Bellas Artes de Lisboa. Inició su carrera artística en la década de los setenta como pintor, ligado a una iconografía pop; pero pronto comenzó a investigar con nuevos lenguajes artísticos como el vídeo y la instalación, además de la escultura… Una de las constantes de la obra de Sarmento es la exploración del cuerpo humano, aunque no lo represente de manera explícita, creando un juego entre el deseo y el dolor. Otros temas en su obra son: el sentido de lo trágico, el deseo, las evocaciones literarias y cinematográficas o la relación entre los cuerpos realizando reflexiones en torno a la imagen prohibida, la narración, la presencia constante de lo ausente, la atmósfera recurrente de la nostalgia, la seducción… La obra de Sarmento está presente en las colecciones de la Smithsonian Institution de Washington, el Centro Georges Pompidou de París, el IVAM de Valencia… Representó a Portugal en la Bienal de Venecia de 1997. Destaca su labor como docente en centros de arte de Japón, Alemania y España. Vive y trabaja en Estoril.