En 1966, recibe el Primer Premio de Pintura, Dibujo y Paisaje de Vitoria, en 1968, el Tercer Premio Anual Plástica de Vitoria, el Premio en el Certamen Alavés de Pintura, y el Premio de Dibujo de la Escuela de Bellas Artes de San Fernando, así como el Segundo Premio Anual Plástica de Vitoria en 1969, la Medalla de Oro de Paisaje de Motrico en 1979, y el Tercer Premio Fiesta del Olivo de Mora de Toledo. Su obra se inscribe en las corrientes del hiperrealismo
de la década de los setenta, desde la perspectiva y la densidad de la herencia de la pintura vasca de principios del siglo XX. Fernández de Marcote, como Aquerreta
, se diferencia del resto de los pintores de su generación, mediante posiciones próximas al ensimismamiento en el paisaje y la actitud onírica en el tratamiento de la imagen. Destacan sus exposiciones individuales en la galería Windsor Kulturgintza, Bilbao, y en la Galería Free Hand, Los Ángeles, California. Su obra se encuentra en el Museo de Cuenca, Museo de Arte Contemporáneo de Madrid, Crysler Museum, Norfolk, Virginia, Universidad Thomas Jefferson, Filadelfia, y Museo de Bellas Artes de Álava, Vitoria.