Waltercio Caldas, ejercicios de observación

Waltercio Caldas: O Ar Mais Próximo e Outras Matérias Waltercio Caldas: O Ar Mais Próximo e Outras Matérias

La Pinacoteca de São Paulo repasa la trayectoria del artista y muestra nueve de sus trabajos inéditos


São Paulo, 21/02/2013

Cerca de noventa obras, entre instalaciones, esculturas, objetos y diseños, entre ellas las inéditas en Brasil Eureca (2001) O que é mundo. O que não é (2011), Verde por Dentro (2008), Planisfério (2011), Talco (2008), Donde (2009), O Ovo (2011), Azul de Superfície (2005) y Asas (2008), forman parte de “Waltercio Caldas: O Ar Mais Próximo e Outras Matérias” antología que la Pinacoteca de São Paulo dedica a este artista bajo el comisariado de Gabriel Pérez-Barreiro y Ursula Davila-Villa, director de la Colección Patricia Phelps de Cisneros y comisaria adjunta del Blanton Museum of Art respectívamente.

El recorrido propuesto entre los trabajos expuestos, fechados entre 1970 y 2011, está concebido para propiciar una reflexión sobre la evolución de la producción inicial y última de Caldas, uno de los artistas brasileños que más muestras individuales ha protagonizado en ese país entre 1987 y 2012: un total de veinticinco. Sus trabajos son testimonio de un lenguaje propio y bastante peculiar, ni conceptual, ni minimalista, ni formalista, y de una evidente pretensión de desafiar nuestra capacidad perceptiva, de examinar cómo encaramos la contemplación de un conjunto de materiales aparentemente reunidos por el azar, desde el primer acercamiento hasta nuestras múltiples interpretaciones pasando por un reconocimiento superficial como paso intermedio.

Waltercio Caldas: O Ar Mais Próximo e Outras Matérias

Waltercio Caldas: O Ar Mais Próximo e Outras Matérias

En definitiva, las obras de Caldas constituyen para nosotros exámenes de observación, al permitir que nuestra capacidad de pensamiento visual se amplíe y dejarnos comprender que lo que en un primer vistazo reconocemos como válido puede después transformarse, tanto si hablamos de la propia obra como si nos referimos al espacio que ocupa. Algunos de sus objetos de mármol, vidrio o madera presentan superficies que reflejan su entorno, otras son completamente transparentes invitando al ojo a atravesarlas, como Aquário completamente cheio (1981), un recipiente de vidrio que es desbordado por el agua y que reúne ambas características: refleja el entorno circundante como un espejo y funciona como lente para ver a su trasluz desde una perspectiva diferente.

Estas obras sólo cobran sentido y alcanzan su significado último al interactuar con el visitante, al que Caldas trata de sumergir en una experiencia tanto corpórea como intelectual: Escultura en granito (1986) consta de un rectángulo negro arqueado que se equilibra sobre sus extremos y en el que las superficies curvas parecen crearnos la ilusión de que un material tan pesado como el granito puede levitar y desafiar la ley de la gravedad.

Ligereza, elegancia y economía de medios son las características más marcadas de la obra de Caldas, que en definitiva busca producir el mayor impacto en el espectador con la mayor sencillez. Incluso en las piezas que reúnen mayor número de elementos, la presentación de éstos suele reducirse a una simplicidad geométrica integrada por círculos, líneas y puntos que se relacionan entre sí dando lugar a composiciones armoniosas que la comisaria Davila-Villa compara con instrumentos musicales.

Da título a la exhibición la paradigmática instalación O Ar Mais Próximo (1991), compuesta por hilos de colores que cuelgan del techo y conforman delicados arcos invertidos. Caldas interviene a fondo en la preparación de sus muestras, y en ésta también ha ocurrido: rediseña la disposición de sus obras en función de las medidas de las paredes, la situación de ventanas y entradas de luz…

Otra parte representativa de su producción, también representada en esta muestra, son los libros de artista, en los que Caldas hace un uso lúdico de la palabra escrita para destacar asuntos de su interés relacionados con la historia del arte, la filosofía o los sistemas de conocimiento.

Una contemplación detenida del legado de Caldas presente en la Pinacoteca de São Paulo nos permitirá conocer la gran variedad de sus prácticas, pero también cómo el espacio dónde se exhiben puede determinar su percepción.


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