La extraña habilidad de Urs Fischer para presentar objetos a punto de desintegrarse o sometidos a una transformación de índole casi psíquica y transformarlos es esculturas elaboradas con una desconcertante variedad de materiales, desde la cera al pan, es el eje de estudio de su nueva muestra en la Galerie Gagosian de París, abierta hasta el 26 de mayo.
En los últimos años, la producción de Fischer ha estudiado las posibles intersecciones entre los géneros del arte clásico (el desnudo, el bodegón, el retrato) y la vida cotidiana en esculturas e instalaciones que crean realidades alternativas y artificiales.
Nacido en Zürich en 1973, Fischer ha mostrado recientemente su obra en Kunsthaus Zürich, el Centre Pompidou, el Museo de la Universidad de Houston, el New Museum de Nueva York o la Bienal de Venecia en sus ediciones de 2003, 2007 y 2011.
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Desconcertante Urs Fischer. Los Ángeles, 22/02/2012
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