Se confirman las pesquisas: la búsqueda del fresco perdido de Leonardo La batalla de Anghiari fue iniciada hace 36 años por el ingeniero florentino Maurizio Seracini, que investigó si esta obra se encontraba escondida detrás de otro fresco que representa La batalla de Scannagallo, pintado en 1563 por Vasari, célebre arquitecto, pintor e historiador del arte.
Seracini acaba de confirmar que una muestra de color negro encontrada detrás del fresco de Vasari tiene una composición química compatible con el negro usado en La Gioconda y en el San Juan Bautista de Leonardo.
Gracias a su laboratorio científico, que ha desarrollado herramientas y tecnologías de vanguardia para analizar y reconstruir monumentos y obras de arte en general, el ingeniero y un grupo de científicos intensificaron su trabajo en las últimas semanas. Además de pigmentos negros, se han encontrado fragmentos de material rojo, asociados a laca. Además, imágenes obtenidas con la sonda endoscópica muestran una capa beige que, según los investigadores, sólo puede haber sido ejecutada con un pincel.
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