Una exposición en el ZKM de Kalsruhe analiza los materiales utilizados en la pintura italiana durante los años cincuenta y sesenta
Peter Weibel es el comisario de la exposición que bajo el título “Rome Open Painting.
ZKM. ZENTRUM FÜR KUNST UND MEDIETECHNOLOGIE
Lorenzstraße 19
Karlsruhe
The Material Picture in Italy during the 1950s and 1960s” podremos contemplar en el ZKM. Zentrum für Kunst und Medietechnologie de Kalsruhe hasta el 24 de agosto y que analiza una serie de prácticas revolucionarias en el ámbito de la pintura contemporánea italiana. Ya desde los años veinte se venía desarrollando en torno a Roma un concepto muy innovador de imagen plástica que prescindía del empleo de tela y óleo, pero fue en la década de los cincuenta cuando se inició la verdadera destrucción de la pintura en su soporte tradicional, de la mano de artistas como Lucio Fontana o Burri, a la par que una auténtica catarsis de importantes consecuencias en la historia del arte. No sólo se rechaza la representación figurativa al uso, también se perforan los lienzos, o bien se ondula su superficie, se estira; en esa línea, los creadores Giuseppe Uncini, Agenore Fabbri o Paolo Scheggi utilizan plástico, madera, metal, mármol u hormigón como base de sus obras. Este uso caprichoso de los materiales no sólo marcó un punto cero en la historia de la pintura, también el comienzo del arte como exaltación de la cotidianidad, mediante el empleo del soporte pictórico como escenario de presentación de objetos de uso cotidiano, tal como vemos en las Combine Paintings de Rauschenberg (quien residió en Roma durante los años cincuenta) y en el Pop Art de los sesenta. La mayoría de las piezas que se exhiben en la muestra proceden de la Fundación VAF, que posee uno de los fondos más destacados de arte italiano contemporáneo, del que se nutre en buena parte la colección del ZKM. Otras han viajado a Kalsruhe desde museos públicos y colecciones privadas, la mayoría de ellos italianos.
Enrico Prampolini
Astrazione Plastica, 1954