Pompeya: una reconstrucción de la catástrofe

Pompeya, catástrofe bajo el Vesubio

Piezas originales llegadas del Museo de Nápoles y diversas recreaciones nos enseñan en el Centro de Exposiciones Arte Canal cómo era la Pompeya anterior a la erupción del Vesubio

Madrid, 07/12/2012

“Pompeya, catástrofe bajo el Vesubio”

CENTRO DE EXPOSICIONES ARTE CANAL
Paseo de la Castellana, 214
28046 Madrid
Del 6 de diciembre de 2012 al 5 de mayo de 2013
Todos los días, de 10:00 a 21:00 horas

 

En el año 79 d.C, tuvo lugar la erupción volcánica más célebre de la historia, la que hundió bajo cenizas a la ciudad romana de Pompeya.

Para acercarnos a aquel momento histórico y a la vida en la Pompeya anterior a su destrucción por el Vesubio, el Centro de Exposiciones Arte Canal presenta hasta el 5 de mayo del año que viene la exposición “Pompeya, catástrofe bajo el Vesubio”, que cuenta con un total de 637 piezas, 629 originales, en su mayoría inéditas en España.

Proceden fundamentalmente del Museo de Nápoles y de las excavaciones de Pompeya, Herculano, Boscorreale, Nola y Estabia y entre ellas figura la llamada Gioconda pompeyana, una obra cumbre de la pintura de la época.

El recorrido expositivo ha sido concebido para mostrar la vida antes de la erupción, cómo quedó la ciudad tras la tragedia y cómo la arqueología ha ido recuperando para nosotros los hechos de lo que significó la erupción y su aportación al conocimiento del Imperio Romano.

En este sentido, que Pompeya quedara enterrada por las cenizas ha permitido que algunas piezas de arte romano hayan llegado hasta hoy en muy buen estado de conservación, como el Apolo Arcaizante, recuperado de la Casa Menandro, una de la construcciones romanas desenterradas el pasado siglo.

La exposición sobre Pompeya es la décima muestra que organiza la Comunidad de Madrid en la sala de Arte del depósito de agua del Canal de Isabel II Gestión de la Plaza de Castilla y busca elogiar también la labor del monarca Carlos III en cuanto al cuidado de la protección y la documentación de los objetos hallados en las excavaciones, evitando que saliesen de su lugar de origen.

Como es habitual, la muestra se acompaña de actividades educativas: se ha dedicado una zona de la sala a la realización de talleres didácticos para que los visitantes más pequeños, entre 3 y 12 años, puedan conocer los modos de vida de la época romana y se conciencien de la necesidad de preservar el patrimonio histórico-arqueológico.

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