Hace treinta años, la National Gallery de Londres encargó a la artista portuguesa Paula Rego la creación de un mural para el entonces nuevo comedor de su ala Sainsbury. Diseñó entonces la pintora su Jardín de Crivelli, inspirándose en el retablo de La Madonna della Rondine (La Virgen de la Golondrina) de Carlo Crivelli, ejecutado este a fines del siglo XV para narrar la historia de ciertas figuras femeninas de la Biblia y de la Leyenda dorada.
La Virgen María, Santa Catalina, María Magdalena o Dalila se dan cita en la composición de Rego, entre paredes de azulejos lusos azules y blancos: se nos presentan como mujeres valientes y fuertes inspiradas en familiares, amigas y empleadas del museo británico en aquel momento.
Hasta el 29 de octubre, la National Gallery nos muestra ese trabajo junto a dibujos originales y el retablo medieval que inspiró a la autora.
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