Muybridge: apología del instante

La Tate Britain inaugura la primera muestra exhaustiva del fotógrafo

Muybridge adquirió fama internacional cuando demostró que los caballos podían volar. Empleando la tecnología más avanzada de su época, pudo captar con un grupo de cámaras lo que el ojo humano nunca había podido percibir: que, a lo largo de su galope y en un momento de su acción de correr, el caballo levanta las cuatro patas sobre el suelo. Buscando un medio para compartir sus innovadoras investigaciones, el fotógrafo inventó el Zoopraxiscopio, un método para proyectar las versiones animadas de sus instantáneas a modo de breves secuencias en movimiento. Muybridge se anticipaba, de ese modo, a la posterior evolución técnica del cine.

 

De origen británico, el artista emigró a Estados Unidos en la década de 1850 y allí se convertiría en uno de los fotógrafos más conocidos de todos los tiempos. Exploró hasta sus últimas consecuencias las posibilidades de las cámaras de entonces en sus innumerables imágenes de animales y seres humanos en plena acción física y en sus impresionantes panoramas del paisaje norteamericano, destacando sus vistas del valle de Yosemite y de la incipiente ciudad de San Francisco.

La Tate Britain exhibe, hasta el próximo 16 de enero, una amplia selección de la producción de Muybridge, incluyendo una panorámica de 17 pies de San Francisco y sus zonas de ocio. La influencia de estos trabajos en el arte posterior fue muy amplia y ha cambiado para siempre nuestra percepción del mundo; la encontramos, entre múltiples ejemplos, en el Desnudo descendiendo una escalera de Marcel Duchamp, en numerosas obras de Francis Bacon o en la exitosa película Matrix.

Coincidiendo con esta exposición, la ciudad natal de Muybridge, Kingston upon Thames, dedica a este autor sendas muestras temporales en el Museo Galería Stanley Picker y en la Universidad de la localidad.

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