Francisco Calvo Serraller
Cuatro mujeres actuales, como si fueran el mismo patrón de mujer trabajadora de cuatro puntos cardinales diferentes- Suecia, Rusia, Francia y EEUU- y echando humo, es el fondo de la narración que con delicadeza punzante, intimismo e ironía, presenta Zilla Leutenegger en la muestra “Las fumadoras”, en la que, como en ella es habitual, se mezclan soportes y técnicas distintos: dibujo, animación, video o fotografía, junto a la máquina que ahuma la instalación y que envuelve al visitante en un fluido evanescente.
Galería Vacío, Madrid
Hasta el 10 de enero de 2005
El humo que expelen sus mujeres, es como el cálido aliento en una atmósfera fría y lánguida, entumecedora, poblada de vacío.
Con un punto de elegancia en el dibujo que le sale al desgaire con fresca naturalidad, la artista alemana subraya la fatiga física de sus personajes en su posición de estar tumbadas, y la fatiga moral, la que emana a través de las volutas del ensimismamiento, como una manera de enfrascarse en el propio aislamiento. Una obra que nos deja una huella de cierto estremecimiento a flor de piel.