Las frecuencias de Bernier

Nicolas Bernier, canadiense del 77, es autor de instalaciones, performances sonoras, post-rock, electrónica en vivo, música concreta y videoarte pero también ha trabajado con danza o teatro. El punto de unión de su trabajo en medios tan diversos es su interés por las relaciones y la posibilidad de equilibrio entre lo sensual y lo cerebral, el proceso digital y las fuentes orgánicas del sonido, entre lo viejo y lo nuevo.

Creador de una música electrónica que se percibe como artesanal al estar realizada a partir de objetos como máquinas de escribir, diapasones o máquinas antiguas, ha sido galardonado con el prestigioso premio Ars Electrónica y ha participado en festivales como el SONAR (España), Mutek (Canadá), DotMov (Japón) y Transmediale (Alemania) .

A lo largo de este mes de agosto, Bernier ha trabajado en residencia en el LABoratorio de Sonido de LABoral para dar forma a la instalación audiovisual frequencies (light quanta), que podemos contemplar en ese mismo espacio del centro asturiano hasta el 13 de octubre y que supone una adaptación de su obra anterior frequences (a) (7). Esta vez se ha centrado en la investigación de los cuantos (la cantidad de energía más pequeña que se puede medir) y de las potenciales relaciones conceptuales entre los principios fundamentales de la física cuántica aplicados al proceso creativo audiovisual: partículas, probabilidades, dualidad onda/partícula y la discontinuidad.

El resultado es una composición audiovisual que consta de un centenar de fragmentos sonoros y lumínicos que se desarrollan aleatoriamente dando lugar a una forma en continua expansión en el tiempo y en el espacio.

Bernier ha investigado potenciales relaciones conceptuales entre los principios fundamentales de la física cuántica aplicados al proceso creativo audiovisual

Dado que los fotones (cuantos de luz) son emitidos por los electrones, podríamos creer que la señal eléctrica de los sonidos de la instalación es el desencadenante de las señales de luz, pero la composición sonora se basa fundamentalmente en la utilización de micro sonidos y “clicks”, los sonidos audibles más breves que pueden oir los seres humanos.

La estructura arquitectónica de las frecuencias (cuantos de luz) supone una interpretación poética, por parte de Bernier, de las lecturas proporcionadas por los equipos y circuitos electrónicos que nos ayudan a comprender mejor el universo infinitesimal.

Como el propio artista explica en esta entrevista a Naiara Valdano de @art_gossips, a nivel sonoro, todos los sonidos han sido realizados usando una herramienta de síntesis granular desarrollada por el artista italiano Ennio Mazzon para la marca Farmacia901 y la síntesis granular está basada en la idea de manipular micro partículas de sonido.