Francisco Calvo Serraller
Nos encontramos con una exposición de historia y de arte.
Museo Nacional del Prado, Madrid
Del 14 de marzo al 2 de junio de 2002
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De historia, porque el trasfondo que rebulle reconstruye la formidable colección de arte formada por Carlos I (vendida públicamente tras su trágica decapitación) y las complejas relaciones hispano-británicas a lo largo de la primera mitad del siglo XVII. Y de arte, porque se adentra en la génesis del coleccionismo artístico durante el Antiguo Régimen, antecedente de nuestras actuales colecciones públicas, y conciencia sobre una de las fuentes que han nutrido la colección del Prado, ya que, no en vano, uno de los principales adquirientes de la subasta fue Felipe IV.
Con un montaje diseñado por el artista Gustavo Torner, y que ayuda eficazmente a resaltar la intención y empaque de la exposición, no es necesario ponderar las obras artísticas presentes, destacando el Veronés y el Correggio, de la National Gallery de Endimburgo y Londres.
Velázquez
Felipe IV
Daniel Mytens
Carlos, Príncipe de Gales
Andrea Mantegna
El tránsito de la Virgen