Kitasono Katue. La Disparition d’Honoré Subrac, 1960
El LACMA dedica una muestra al poeta y artista surrealista
“Kitasono Katue: Surrealist Poet”
LOS ANGELES COUNTY MUSEUM OF ART. LACMA
5905 Wilshire Boulevard CA
90036 Los Ángeles
Del 3 de agosto al 1 de diciembre de 2013
Lunes, martes y jueves, de 12:00 a 20:00 horas
Viernes, de 12:00 a 21:00 horas
Sábado y domingo, de 11:00 a 20:00 horas
Activo desde mediados de los veinte y prolífico a partes iguales en su labor como poeta y como artista, Kitasono Katue (1902-1978) fue uno de los creadores nipones más conocidos en Europa y Estados Unidos a mediados del siglo pasado, y no es casual: su prioridad fue siempre encontrar un terreno común con escritores y artistas occidentales; en un primer momento se dejó seducir por el Dadaísmo y el Surrealismo y más tarde absorbió las ideas del futurismo, el cubismo, el expresionismo abstracto y el minimalismo.
Sus poemas se difundieron a menudo en revistas de artes visuales y poemas que en ocasiones el propio Katue editaba, pues trabajó también como diseñador gráfico. Entre ellas figura VOU, revista que se publicó entre 1935 y 1940 y de nuevo desde 1945 hasta la muerte del artista en el 78.
En total, Katue editó o diseñó más de medio millar de libros y revistas de poesía y también fue autor de numerosas portadas de novelas, de revistas especializadas y de publicaciones comerciales. En muchas de ellas encontramos sus Plastic Poems, piezas que hoy llamaríamos poemas visuales y que el japonés comenzó a llevar a cabo inspirándose en las imágenes de algunos de los artistas que participaban en VOU.
Kitasono Katue. La Lunne Noire, La Moustache en Cendres, 1963
Kitasono Katue. Tsukue journal (机), vol. 8, no. 2, 1957
En sus primeros poemas experimentales, Katue tomó la descomposición del lenguaje propia del Dadaísmo (lo vemos en Electrical Annuciation, de 1925), para después aproximarse a las estructuras verbales del Zen y a cierto humor negro ligado al Surrealismo. Es posible que las poesías en prosa de Max Jacob influyeran en su posterior camino hacia la plasticidad de su obra literaria, y seguramente su uso de la fotografía intervino en ese proceso. También las ideas de su amigo Pound le ayudaron a desarrollar su idea de ideoplástica, que Víctor Brauner desarrollaba paralelamente bajo el título de pictopoesía.
La abstracción también resultaría decisiva en los poemas visuales de Katue, fascinado por la obra de Albers y por la de Malevich, al que dedicó el poema Espacio Monótono.
Su deriva hacia la imagen y su abandono de la palabra se hicieron paulatinamente inevitables; en 1966 declaró que las palabras son los símbolos más inciertos inventados por los hombres como vía de comunicación y trató de volver a un lenguaje entendido como primario, el de signos e imágenes: crearé mi poesía a través del lente de mi cámara, con pedazos de papel, cartones, cristales etc. Este es el nacimiento de una nueva poesía.